TW
0

La crisis suavizará el crecimiento de plazas «rápido y difícil de digerir» que ha sufrido el sistema escolar de Balears en los últimos años, provocado por «el aumento de alumnos inmigrantes» y que ha venido acompañado de «recursos inadecuados». La recesión, según Martí March, vicerrector de la UIB, podrá verse como «una oportunidad» para que «los centros públicos bajen sus ratios alumno-profesor» y puedan ofrecer una educación menos masificada, como dio a conocer ayer durante la presentación en la Cambra de Comerç del Anuari de l'educació de les Illes Balears 2008.

En su quinta edición, la publicación, que cuenta con la colaboración de Caixa Colonya, analiza el impacto de la inmigración en el sistema educativo balear.

«En poco tiempo, se ha pasado de unas escuelas uniformes a otras diversas», según March. Una diversidad que se ha distribuido «de forma desigual» y que ha tenido varias consecuencias. Por una parte, que, en aquellos centros públicos con mayor número de inmigrantes, el nivel de rendimiento de los alumnos «no sea el óptimo», pudiendo darse casos de 'guetización', «una imagen no positiva de la escuela pública» y «la segregación de determinados centros». De ahí que muchos padres opten por «no matricular a sus hijos en colegios con un número elevado de inmigrantes», dijo March. ¿Cuáles son las claves para que esta tendencia cambie? Primero, «debe marcarse un máximo de entre un 20 y un 25 por ciento de alumnado inmigrante en los centros». Después, «deberían dotarse mejor», sobre todo en lo que se refiere a recursos humanos, ya que deberían recibir «un trato diferenciado porque viven situaciones diferenciadas», según el vicerrector de la UIB. Por último, la escuela no debe ser «el único elemento socializador», sino que «deben implicarse y colaborar las entidades de la zona». «Sería una ingenuidad creer que sólo los centros escolares pueden cohesionar a los alumnos», explicó March. Otro error es «construir grandes centros» porque «la masificación crea más problemas».

El anuario, en el que han trabajado más de 25 expertos, no se centra sólo en el impacto de la inmigración en el sistema educativo. También realiza un análisis de cómo ha evolucionado la educación primaria en las Islas y estudia el caso de las cooperativas de enseñanza, «una forma interesante de gestionar la educación que demuestra que la enseñanza concertada es plural».