16/09/09 0:00
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S.C. La modificación del proyecto de Son Espases aprobado por el gobierno de Jaume Matas para disminuir el impacto ambiental y paisagístico sobre el monsestir de La Real y transformarlo en un hospital del siglo XXI costará al Servei Balear de Salut (IB-Salut) dos millones de euros anuales más de los presupuestados inicialmente.

Así lo ha confirmado el director general del IB-Salut, Josep M. Pomar, afirmando que «llevamos un año negociando con la UTE concesionaria de las obras -formada por las empresas Dragados-FCC-Construcción S.A.-Melchor Mascaró-Llabrés Feliu- para alcanzar un acuerdo», que ya está en su recta final, que ahora tendrá que ser informado por la asesoría jurídica, intervención, el Consell Consultiu y posteriormente aprobado por el Consell de Govern.

Pomar -acompañado por el equipo que se ha encargado de coordinar la modificación del proyecto: Luis Carretero, Manuel Palominio y Carlos Palomeque- ha explicado a Ultima Hora que, el gasto anual del actual Son Dureta es de 300 millones de euros anuales, «con el proyecto del PP el coste anual hubiera sido de 313 millones y con el proyecto modificado será de 315 millones».

Los aproximadamente 2 millones de euros anuales más que pagará el IB-Salut hasta 2036 por la modificación del proyecto los justifican desde la Conselleria de Salut i Consum con las mejoras introducidas en el mismo, anunciadas en su día por el president Antich.

El proyecto modificado incluye la ampliación del número total de quirófanos en cuatro con una superficie total de más de 2.260 me. Se crea una unidad independiente del bloque quirúrgico general de cirugía mayor ambulatoria. Se incorporan cuatro quirófanos de máxima integración (quirófanos inteligentes).

Por otra parte se amplía en 1.216 m2 el Servicio de Urgencias estableciendo unidades y circulaciones diferenciadas de adultos, pediatría y urgencias traumatológicas y se incluyen dos habitaciones de aislamiento biológico.

Se instalará una cuarta resonancia magnética y un PET de última generación. También dispondrá de un servicio de oncología radioterápica con un cuarto acelerador lineal y se amplia en 1.200 m2 el área de cuidados críticos.

Se ha rediseñado y ampliado el área asistencial destinada a la Unidad de Trastornos Alimentarios (UTCA) en el nuevo edificio de salud mental y se contará con una nueva instalación para Psiquiatría Infantojuvenil, en la planta adicional del nuevo edificio destinado a salud mental.

También, la creación de una unidad de patología infecciosa de tres habitaciones, convertible en área asistencial de aislamiento de máxima seguridad ante emergencias biológicas, además de reservar un espacio para Investigación Biomética de 2.400 m2. Además, hay mejoras de adaptación al código técnico de la edificación.