El público del Principal podría quedarse sin disfrutra de la ópera. | Jaume Morey

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La temporada de ópera en el Teatre Principal de Palma está oficialmente en alerta roja. El conseller insular de Cultura, Joan Font, confirmó ayer a Ultima Hora que si no se consigue una partida económica extra que refuerce el presupuesto del centro, severamente recortado este 2010, la XIV temporada operística no se celebrará. Font explicó que el Consell está estudiando medidas para salvarla.

La institución insular anunció hace unas semanas que el Principal dispondría este año de 577.463 euros para programar. Entonces, ni las autoridades ni Joan Arrom, director del centro, pudieron precisar cómo afectaría eso a la ópera, que el año anterior había contado con una partida de unos 600.000 euros. Ayer Font confiró lo que ya se comentaba en los pasillos del teatro: que el presupuesto destinado a la ópera cae un 68%, situándose en torno a los 193.000 euros. «Si sólo se dispone de estos recursos no habrá ópera en el Principal», admitió.

En cualquier caso, Font explicó que las representaciones podrían finalmente celebrarse con una inyección económica de «entre 400.000 y 500.000 euros» extras. Esta partida procedería, por un parte, de una «recuperación del IVA, proveniente de las obras de reforma que se realizaron en el teatro».

Esta devolución se solicitó «hace tiempo» y debería recibirse en estas fechas. Por otra parte, el Consell está negociando con varias empresas para que se conviertan en patrocinadores privados del Principal. Aunque todavía es pronto para revelar la identidad de estos 'socios privados', Font precisó que son «dos o tres» y de Mallorca. El medio millón de euros extra se destinaría «mayoritariamente» a la ópera.

Calendario
Joan Font aclaró que no se ha establecido una fecha límite para concretar esta partida económica suplementaria, pero que el Consell trabaja para disponer de ella «a mediados de febrero, como máximo». Con todo, si así fuera, el dinero podría no haber llegado con suficiente antelación para garantizar la óptima preparación de la temporada operística, prevista para los meses de abril, mayo y junio. Font confirmó que, en este caso, la temporada deberá aplazarse y tendría lugar «más adelante».

La anterior temporada de ópera, en la que el Principal programó Faust, Il Barbiere di Siviglia y La Bohème, se saldó con llenos absolutos en todas las funciones.