La Virgen fue colocada en el soberbio monumento mariano en la iglesia de la Concepción. | J. Lladó

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La iglesia del monasterio de la Concepción de Palma de las hermanas Agustinas del Amparo acogió ayer tarde el solemne traslado de la imagen de la Virgen yacente a su precioso tálamo, acto que contó con mucha asistencia de fieles y representantes de la Asociación Arca.

Como es costumbre, para esta ocasión, el templo lució sus mejores galas, apreciándose cómo cuidan sus moradoras los detalles de la fiesta en cuanto a primorosos manteles de los altares; las vestiduras de los celebrantes y como no podía faltar por la Asunción, la profusión de macetas de bellveures y albahaca, cuyo especial aroma da la bienvenida a los vivistantes apenas cruza el umbral del portal mayor.

Procesión

Tras el rezo del santo rosario y exposición del Santísimo se procedió al acto del traslado de la imagen, que presidió el vicario de Sant Jaume, Toni Pons. Entre los asistentes estuvieron el presidente de la Real Cofradía de Santiago, Toni Enseñat, y del Cristo de los Navegantes,Toni López, encargados de custodiar y portar la imagen, la superiora de la comunidad, Sor Catalina Cunill, y la directora del colegio Santa Mónica madre Serafina Vilanova.

Los fieles iniciaron una larga procesión por el claustro del monasterio, seguids por la imagen de la Virgen portada a hombros por los cofrades, y las monjas de la comunidad, mientras por megafonía se oía el Ave Maria de Schubert. Una vez finalizado el traslado la imagen quedó instalada en el espectacular llit de la Mare de Dèu, que estará expuesto hasta el próximo día 22 de agosto (la oactava).

Según el escritor Diego Zaforteza y Musoles, el autor del llit es el escultor Miquel Barceló que lo empezó en 1685 y Jaime Blanquer el pintor que trabajó en el decorado del lecho de la Virgen.