La rebaja producido hoy se debe a la débil situación de liquidez de la comunidad autónoma, que ha empeorado en el último año debido a las desviaciones presupuestarias y a la reducción de las líneas de crédito, según ha explicado la calificadora.
El Govern ha señalado en un comunicado que adopta «una actitud de prudencia» de la cualificación porque va acompaña de la inclusión de Baleares en el CreditWatch Negative de la agencia, lo que implica una vigilancia de la situación de la comunidad autónoma, «principalmente por la situación de riesgo del país, la crisis de la deuda soberana y la inestabilidad de los mercados financieros».
Del informe emitido por Standard & Poor's, el Govern destaca que a pesar de la rebaja, las islas mantienen una calificación alta de «A», lo que significa que Baleares «presenta una capacidad fuerte para cumplir con sus compromisos financieros», indica la nota del Govern.
El ejecutivo también resalta que el informe sindica que, a pesar de la reducción de los ingresos de un 11 % en 2011, la administración continuó «gastando demasiado» a comienzos de año, como refleja el déficit de junio, estimado en el 2,1% del PIB regional, en comparación con el objetivo anual del 1,3 % marcado por el Gobierno central.
El Govern destaca que la agencia de calificación valora el esfuerzo del actual ejecutivo balear que está «adoptando fuertes medidas para revertir el curso de la situación y reducir los gastos (que se estima que se reducirán en un 13 % año tras año), reducir las inversiones (con una disminución estimada del 24 %) y reorganizar el sector público».
La agencia prevé que la región mejore sus resultados presupuestarios a finales de 2011 en comparación con 2010, aunque las cifras «siguen siendo débiles».
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