Bauzá, tras las cortinas que dan acceso al salón de sesiones del Parlament. | J. TORRES

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La Fiscalía de Balears ha abierto diligencias informativas para determinar si existe responsabilidad penal en una serie de actuaciones del president José Ramón Bauzá en la gestión de sus negocios privados y en el nombramiento y destitución de un cargo de IB3, concretamente de Francisco de Borja Rupérez, con quien el president mantuvo previamente una relación comercial a través de una de sus empresas, una vinoteca llamada Divino .

La apertura de la investigación, que fue confirmada a Ultima Hora en fuentes judiciales, tiene su origen en un escrito de denuncia presentado el pasado mes de agosto por Biel Barceló y Fina Santiago en representación de su grupo parlamentario, el PSM-Iniciativaverds-Entesa.

En su escrito, de tres páginas, Barcelo y Santiago, ponen en conocimiento de la Fiscalía una serie de hechos que, en opinión de los denunciantes, podrían enmarcarse en «la presunta comisión de un delito de prevaricación» y en otro de «tráfico de influencias».

A juicio de la parte denunciante existe un vínculo claro entre la contratación de Borja Rupérez como gerente de IB3 y su relación con Bauzá. Según el relato de los hechos entregado a la Fiscalía, Bauzá estaba en negociaciones con Rupérez y otra persona, Jesús Bleda, para que comprasen Divino. Al romperse las negociaciones, Rupérez fue destituido en su cargo.

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Se puede archivar

El PSM, en su escrito, alude igualmente a la participación de Bauzá en la empresa Bauser y en la titularidad de una farmacia. En su declaración de actividades, como parlamentario, Bauzá no incluyó estas empresas.

Ni la aceptación por parte de la Fiscalía de este escrito ni la apertura de diligencias supone, el inicio de ningún proceso contra el president.

La denuncia puede derivar en una acción penal (que tendría que dilucidarse en la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Balears, al tratarse de un aforado) o, por el contrario, ser archivada.

Los hechos denunciados ya fueron expuestos hace unos meses por la asociación de productores Aproba, que alertó de la aparición de grabaciones que podían afectar al president. Bauzá reaccionó querellándose con Aproba.