El obispo Salinas se presenta ante los medios . | Joan Torres

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El obispo electo de Mallorca, Xavier Salinas, se ha comprometido hoy a no vivir al margen de la sociedad, a dialogar y a contribuir a la reflexión común para «fortalecer más la sociedad civil» como mejor forma de hacer frente a la crisis.

Salinas ha ofrecido una rueda de prensa en Palma dos días antes de su toma de posesión como obispo, que tendrá lugar el sábado en la Catedral de Mallorca, y ha dicho estar «muy contento» de haber sido designado para dirigir la diócesis de la isla, una tierra a la que se siente muy cercano.

Ha admitido que en el momento actual, la economía y los mercados «suponen una realidad que supera la voluntad de cada uno» pero ha defendido que hay que «recuperar más el protagonismo de cada uno, la aportación de las personas y de las personas asociadamente».

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«Es necesario fortalecer más la sociedad civil porque es la manera de responder mejor a la situación difícil que vivimos y también es necesario fortalecer más la unión en la Iglesia y la comunión eclesial», ha afirmado.

Ha abogado por mantener el diálogo en la sociedad, con las demás religiones, en el seno de la Iglesia y especialmente con las personas marcadas por el sufrimiento: «Como obispo no puedo vivir al margen de la sociedad y tengo una obligación de diálogo con la sociedad y de generar una opinión pública, contribuir a la reflexión común como una aportación sin la pretensión de determinar una cuestión o un voto en el Parlamento», ha dicho.

Salinas, que se ha dirigido a los medios de comunicación indistintamente en castellano y en catalán, en función de la lengua en que le formulaban las preguntas, ha destacado la importancia de mantener una actitud de «valoración y apertura» en este aspecto y de que no sea una barrera. «Estimo la mía y no me la quitarán, es la mía», ha afirmado en catalán.