Imagen de archivo de una performance que realizaron los alumnos del IES EMili Darder. | Pere Bota

TW
10

La inversión en educación pública en Balears es de 7.233 euros por alumno, lo que la sitúa como la séptima comunidad que más gasta, 800 euros por encima de la media, según el Instituto de Política Familiar de Baleares (IPFB) que critica que dicho gasto no se refleje en resultados.

La entidad ha manifestado en un comunicado que la mayor inversión que refleja el informe del Ministerio de Educación «Cifras de la Educación en España, 2013», no se ve acompañada de resultados, ya que sólo el 76,1 % de los alumnos de Baleares de 12 años ha completado la educación primaria.

El IPFB subraya que ese porcentaje sitúa Baleares en última posición en éxito escolar, muy por debajo de la media nacional que es del 83,7 %.

La entidad destaca que otras comunidades con menor inversión, como Cataluña, con 6.444 euros por alumno, obtienen mucho mejor resultado, con un 90,7 % de estudiantes de 12 años que han acabado la educación primaria, porcentaje que la sitúa en primera posición.

En La Rioja, con una inversión de 7.027 euros, un 86,4 % de alumnos han acabado primaria.

IPFB ha reclamado un pacto por la educación en Baleares que tenga como base el objetivo de mejorar la calidad educativa midiendo los resultados y no las inversiones, así como que los alumnos y padres puedan elegir las mejores opciones de desarrollo personal u profesional midiendo el éxito en función de la mejora de los resultados de cada estudiante.

La entidad ha solicitado también «verdadera autonomía» de los centros para diseñar e implantar métodos pedagógicos propios y la exigencia de la rendición de cuentas con evaluaciones en tercero y sexto de primaria y en segundo y cuarto de ESO, «para detectar con prontitud un posible fracaso escolar».

Entre las peticiones del IPFB destacan también los programas de mejora para alumnos que presenten dificultades de aprendizaje no imputables a la falta de estudio, que haya mayores competencias en los consejos escolares y un refuerzo de directores de los centros y mayor autoridad de los profesores.

«Ante el altísimo porcentaje de fracaso escolar que azota a la educación en nuestra comunidad autónoma, la evaluación de resultados, la libre elección de centro, el aumento de contenidos comunes y la creación de una nueva formación profesional básica puede hacer reducir dicho fracaso», concluye IPFB.