La secretaria de Estado de Presupuestos, Fernández Currás, en el centro, durante la clausura el Congreso Nacional de Auditoría. | Joan Torres

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El Gobierno considera que los controles para evitar la corrupción en los ayuntamientos son suficientes, ya que las cuentas municipales están vigiladas por los interventores y el Tribunal de Cuentas.

La secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, que intervino este viernes en la clausura el Congreso Nacional de Auditoría, desdijo al presidente del Tribunal de Cuentas, que había señalado que el eslabón débil son los municipios, que es donde han fallado los controles porque son insuficientes.

Los asistentes al Congreso Nacional de Auditoría no están de acuerdo con la visión de la secretaria de Estado. Recordaron a Fernández Currás el compromiso del PP de exigir una auditoría anual de las cuentas de los municipios de más de 5.000 habitantes, algo que no se ha cumplido.

Los auditores defendieron que se fijen controles y fiscalizaciones preventivas, que a la larga son mucho más eficaces que las medidas punitivas que se adoptan a posteriori.

En su intervención ante los auditores, Currás reconoció que en este contexto, los ciudadanos exigen más control y transparencia, pero señaló que no tiene que consistir en dar una hiperabundacia de datos que esconda lo importante, sino que debe consistir en publicar solo aquella información que sea relevante y hacerlo de forma comprensible.