El conseller Negueruela espera acabar este año con más sanciones por incumplimiento de la normativa laboral de las que previó en los Presupuestos. La previsión de ingresos para este año es de 1,7 millones de euros. | Pere Bota

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Los presupuestos de la Conselleria de Treball incluyen una partida de 2,3 millones de euros por sanciones relacionadas con abusos laborales en las empresas. La decisión del Govern de incrementar la vigilancia y las inspecciones laborales para que las empresas cumplan con las condiciones que marca la ley se traducirá el año que viene en un aumento del 40 por ciento en la recaudación de las multas.

El conseller de Treball, Iago Negueruela, se mostró convencido de que la previsión quedará por debajo de la realidad ya que el Ejecutivo mantendrá la mano dura para garantizar que los empresarios cumplan. Las inspecciones vigilarán que se cumplen las condiciones de tiempo de trabajo, descansos, horas extraordinarias, pagos de salarios y que no se dan temporalidades no autorizadas o impago de salarios.

La partida correspondiente a las sanciones laborales es una de las más importantes del Presupuesto, pero también es significativa la que afecta a las inspecciones de oferta turística ilegal. El vicepresident del Govern, Biel Barceló, ha incluido una partida de 935.420 euros, un aumento de casi un 30 por ciento. Se debe a un aumento en las inspecciones, pero el vicepresident también añade que hay una parte importante de aumento debido al incremento de las multas.

El tercer departamento que prevé unos mayores ingresos en multas es el de Transports: la previsión es de 968.020 euros, muy por debajo del año pasado, que fue de 1,4 millones de euros.

La Direcció General de Comerç también prevé ingresar 668.320 euros por multas, que básicamente responden a sanciones por abrir comercios en domingos o en festivos no autorizados. Es decir, se ingresará un 50 por ciento más que este año si se cumplen las previsiones.