En el caso de Studio Media no ha habido conformidad y se ha previsto otra vista para el 11 de diciembre. | Pere Bota

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La expresidenta del Parlament balear y del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar, ha acudido este miércoles a dos vistas previas en la Audiencia Provincial por los casos Son Oms y Studio Media.

En el primer caso, ha habido conformidad de las partes y se ha condenado a Munar, por delitos de blanqueo y prevaricación, a tres meses de cárcel sustituible por una multa e inhabilitación de 4 años. Además tendrá que pagar otra multa de 17.000 euros por la cantidad blanqueada.

En el caso de Studio Media no ha habido conformidad y se ha previsto otra vista para el 11 de diciembre para que las partes puedan llegar a un posible acuerdo.

Maria Antònia Munar, que está en prisión desde 2013 con varias condenas por corrupción que suman 14 años, ha admitido que prevaricó y blanqueó capitales en el llamado caso Son Oms y ha pactado pagar 68.500 euros para evitar más años de cárcel.

Inicialmente la Fiscalía solicitaba para la líder de la extinta Unió Mallorquina 6 años de prisión, multa de 2,5 millones de euros y el decomiso de otros 246.000 euros.

En el caso de Studio Media, por el que la Fiscalía le pide una condena a 7 años de cárcel, el tribunal de la sección primera de la Audiencia ha vuelto a fijar la vista para el 11 de diciembre para dar dos semanas a acusación y defensas para tratar de cerrar otro posible acuerdo.

El presunto beneficio arbitrario por parte del Consell de Mallorca a la empresa Studio Media, del que junto a Munar están acusados otros cinco antiguos altos cargos de la institución insular y dos empresarios, es la última causa pendiente de la antigua líder política.

En cuanto a lo acordado este miércoles, el relato del fiscal confirmado por la acusada por el caso Son Oms plantea que ella, en connivencia con el que fuera conseller insular de Territorio, Bartomeu Vicens, y con un abogado y otro alto cargo del partido, ambos ya fallecidos, se apropiaron a finales de los 90 de parte de los terrenos donde se iba a crear el polígono industrial de Son Oms. Se los cedieron sus propietarios a cambio de la recalificación que los políticos controlaban.

Posteriormente, impulsaron desde el Consell de Mallorca un incremento de la edificabilidad que aumentó aún más los beneficios obtenidos por la prevaricación, beneficios que se repartieron y blanquearon.

Vicens, igual que el exvicepresidente del Consell Miquel Nadal, también implicado en la trama corrupta, ya han sido condenados por estos hechos, por lo que quedan al margen de la condena pactada este miércoles, que afecta solo a Munar.

La expresidenta de Mallorca participó, según ha admitido, en una operación de blanqueo de 85.000 euros procedentes de unos beneficios estimados en más de 1,2 millones de euros por unas recalificaciones y modificaciones de la legislación urbanística que constituyen un delito de prevaricación.

A las penas correspondientes a estos delitos se les aplica la atenuante de dilación extraordinaria e indebida en su grado de muy cualificada, lo que permite a Munar eludir penas de prisión.

La antigua líder de UM no ha disfrutado de permisos fuera de la prisión desde que fue encarcelada en el verano de 2013, una situación que podría cambiar cuando quede resuelta la única causa que le queda pendiente.