Francina Armengol, este martes llegando al pleno del Parlament. | Jaume Morey

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La presidenta del Govern, Francina Armengol, y la portavoz del PP, Marga Prohens, se han acusado este martes en el Parlament de gobernar, en la actual y en la pasada legislatura, respectivamente, imponiendo sus políticas sin diálogo.

Prohens ha resumido en su pregunta a la presidenta en el pleno todas las intervenciones previas de su grupo alusivas a la falta de diálogo respecto al plan de transportes, la liquidación de los anticipos a los consells, la ampliación del parque de la Albufera y ha añadido el desacuerdo de los médicos con el decreto de catalán y de las asociaciones de alquiler turístico con la zonificación.

Para la portavoz del PP, estas iniciativas revelan que las apelaciones al consenso del Govern son desmentidas por sus actuaciones, igual que en el seno del ejecutivo se pone de manifiesto la división entre PSIB y MÉS. «No debe ser fácil dialogar con una vicepresidenta que usted vetó», ha apostillado.

Armengol, que ha atribuido a la «escalada en la lucha con Ciudadanos» el que, a su juicio, Prohens estuviera hoy «tensa y nerviosa», ha vuelto a plantear que el PP está deslegitimado para recriminar falta de diálogo porque eliminó «todos los órganos de participación posibles».

La presidenta ha recordado que el Govern del PP impuso el Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL), despidió a 1.000 docentes y a 1.400 sanitarios, retiró la tarjeta sanitaria a los inmigrantes sin permiso de residencia y cerró los centros de salud por las tardes, entre otras medidas que tuvieron una notable contestación social.

En cuanto al motivo original de la pregunta, la regulación del alquiler vacacional, Prohens ha considerado que la zonificación planteada por los consells es arbitraria y ha prometido que si su partido vuelve a gobernar derogará la ley y promoverá «un gran pacto por el turismo» con los agentes sociales.

Armengol se ha felicitado de que la portavoz popular aclare que reimplantará la prohibición de alquilar a turistas cualquier vivienda en edificios plurifamiliares, como recogía antes de la reforma la Ley de Turismo.