Políticos y representantes de las casas de Balears posan en la entrada del Parlament de les Illes Balears. | Teresa Ayuga

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Los representantes de 19 casas de Baleares en el extranjero pusieron este sábado sobre la mesa en Palma sus principales preocupaciones. La más importante hace referencia a su relevo generacional: temen no tener sucesores.

El Saló d'Actes del Parlament acogió este sábado el encuentro entre los representantes de las casas regionales repartidas por el mundo con los presidentes del Govern, Francina Armengol; del Parlament, Vicenç Thomàs, y la consellera de Presidència Pilar Costa. Este Consejo de Comunidades no se reunía en Baleares desde hace cinco años. La última sesión plenaria se celebró en 2017 en Rosario, Argentina.

En su salutación, Armengol agradeció a los descendientes que «mantengan vivas las raíces, las sensaciones, emociones, identidades e historias comunes» porque «siempre he pensado que un pueblo que no sabe cuál es su historia, que no reconoce su pasado, es imposible que pueda pensar el futuro que quiere». La presidenta también se comprometió a «mantener el apoyo institucional y atender las necesidades de su actividad cultural».

Los portavoces pusieron encima de la mesa su principal preocupación compartida, que es la falta de relevo generacional. Los descendientes dudan de que salga «savia nueva» en sus asociaciones con la vocación necesaria para mantener el proyecto.

Miquel Àngel Coll, director general de Relacions Institucionals, les ofreció la posibilidad de organizar actividades culturales a través del Institut d'Estudis Baleàrics para captar el interés de la gente joven. En la reunión de ayer quedó claro que el catalán supone una inquietud en las casas regionales, que quieren potenciar su conocimiento. De hecho, piden el diseño de un curso on line que sea «ameno». Este interés se extiende al ball de bot: quieren intensificar su práctica.

Este pleno de Consejo de Comunidades en el Exterior, el número 23 desde su creación, reunió a 18 casas de América Latina y una de Alemania. El presupuesto para estas entidades es de 75.000 euros, de los que se han repartido 59.000 en el último ejercicio.

La mayor representación la tuvo ayer Argentina, con doce centros presentes. Los otros países americanos fueron Chile, Uruguay, Cuba, Puerto Rico y República Dominicana.