La Gran Recogida, que arrancó este lunes y finalizará este domingo día 22, será totalmente digital.

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El Banco de Alimentos de Mallorca cruza los dedos para seguir dando respuesta a los más necesitados. El presidente de esta fundación, Raimundo Montis, lo dejó claro ayer durante la visita institucional a propósito de la campaña ‘Operación Kilo’: «La situación es seria». En concreto, avanzó que la fundación abastece a unas 30.000 personas en la Isla –casi el doble si se compara con meses previos al estado de alarma (18.000 ciudadanos)– y distribuye a cerca de 100 entidades.

Pese a esta preocupación, cada vez más evidente debido a la crisis económica actual, Montis se mostró optimista durante la visita de la presidenta del Govern, Francina Armengol y la consellera d’Afers Socials, Fina Santiago, y reconoció que la intención del Banco es «conseguir de esta campaña las cerca de cien toneladas de alimentos que recogemos cada año». Aunque esta vez de una forma virtual.

Montis explicó que la Gran Recogida, que arrancó este lunes y finalizará este domingo día 22, será totalmente digital, a partir de «aportaciones económicas» por transferencias bancarias o bien desde las cajas de los supermercados. Asimismo, Montis destacó que la ayuda institucional y de la «sociedad mallorquina» son clave para mantener vivo el objetivo del Banco.

Perfil

«El tejido productivo, que es el turismo, se paralizó, generando una crisis muy fuerte y que ha hecho cambiar el perfil del beneficiario del Banco». El presidente de la fundación detalló que la pobreza ya no solo acapara a las personas en exclusión social, por ejemplo, sino que ya ha llegado a las clases medias «asalariadas», es decir con nómina, en una situación de ERTE que «tienen compromisos de pagos» pero que no disponen de recursos suficientes para comer.

Por su parte, Armengol reconoció que «la realidad de esta pandemia trae una crisis social y económica muy dura que prevé un invierno muy complicado». Como parte del «compromiso del Govern», Armengol reconoció que las políticas públicas contra la pobreza han conseguido reducir el número de personas en esta situación y recordó, por otro lado, el incremento de las ayudas extraordinarias para entidades que reparten alimentos con un importe total de 280.000 euros. De éstos, 75.000 euros han sido destinados al Banco de Alimentos.

Armengol también avanzó el proyecto de presupuestos de la Comunitat, que prevé un incremento de 28,5 millones, un 13,5 % más, para políticas sociales a fin de «atender a las necesidades urgentes de los ciudadanos afectados por esta crisis».

Por su parte, Fina Santiago detalló la puesta en marcha de la primera red de reparto unificado de entidades que reparten alimentos. «La distribución será esencial este invierno y con esto damos respuesta a las necesidades básicas», subrayó. Santiago también detalló que el Ajuntament de Palma gestionará los certificados de vulnerabilidad que se distribuirán territorialmente a las familias según su ubicación.

El Banco de Alimentos, que cada día reparte unas ocho toneladas de productos, lanzó un llamamiento a la solidaridad y recordó la importancia de colaborar ahora más que nunca.