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La Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca (ADT) ha paralizado las obras de reforma de una vivienda construida ilegalmente en el tipo de suelo rústico de mayor protección urbanística de Baleares: un ANEI de Alto Nivel de Protección (Área Natural de Especial Interés).

La entidad ha explicado que la historia de esta vivienda es un buen ejemplo de las problemáticas urbanísticas más habituales en el suelo rústico de Mallorca, en este caso agravada por estar en un terreno de la máxima protección.

Según la ADT, en la década de los 70 se pidió licencia para construir la vivienda, que fue denegada. Las obras comenzaron, ignorando la denegación, fueron denunciadas y se dictó una orden de paralización municipal que tampoco fue respetada. Las obras de construcción se finalizaron.

La legislación sobre construcciones fuera de ordenación, vigente en Baleares desde 1988, no permite realizar ningún tipo de obra en las edificaciones erigidas sin licencia, ni siquiera de mantenimiento o por seguridad.

Según la ADT, la intención de esta normativa es precisamente «no permitir la consolidación de edificios que se levantaron ignorando completamente la normativa aplicable y en ocasiones ignorando también órdenes de paralización», por lo que «este edificio está abocado a terminar en situación de ruina y a desaparecer, porque nunca se debería haber levantado».

Los propietarios han intentado amparar las obras de reforma que ahora estaban ejecutando en una comunicación previa, pero ésta carece de validez ya que las comunicaciones previas no pueden amparar obras no permitidas por la normativa.

La ADT ordenará la demolición de todas las obras de reforma ejecutadas, que no se podrán reconstruir.

La piscina y la terraza son de ejecución más reciente y la infracción no ha prescrito, por lo que serán objeto de orden de demolición.

La entidad recalca que este caso pone de manifiesto los grandes problemas que se pueden encontrar los propietarios de edificaciones construidas sin licencia, aunque la infracción haya prescrito, por lo que recomienda informarse bien en los ayuntamientos sobre si las edificaciones existentes están amparadas o no en una licencia urbanística.