Salut necesitaría 3.000 enfermeras para llegar a las ratios europeas

El colectivo protestó ayer por segunda vez en Son Llàtzer y Son Espases (a principios de mes lo hicieron en los centros de salud) para pedir mejoras laborales que repercutan en la calidad asistencial de la población. «Hay hospitales en la privada que tienen hasta 15 o 18 pacientes por enfermera; hay cupos en Atención Primaria de entre 3.000 y 3.500 personas por enfermera como ocurre en Eivissa; o residencias en el ámbito sociosanitarios con 200 mayores por enfermera y turno», lamentó Tera.

Las movilizaciones se han convocado a nivel nacional «por la salud de nuestros hospitales que ahora mismo están enfermos de precariedad y temporalidad». Entre sus peticiones está la convocatoria de nuevas oposiciones para que el 100 % de las plantillas sean fijas y un aumento de los recursos y de la financiación. «España le dedica un 6 % del PIB a la sanidad, mientras que otros países le dan hasta un 9 %», recordó Jorge Tera. También hay reivindicaciones de carácter profesional como es el clasificación de las enfermeras en el grupo A de funcionariado, ya que desde el estatuto básico del empleado público aprobado provisionalmente en 2007 están en el A2.

El SATSE reclama también el derecho a una jubilación voluntaria anticipada, igual a la de otros colectivos que trabajan en una situación de penosidad, y que se avance con la ley de seguridad del paciente que, precisamente, regula el número máximo de personas que puede atender una enfermera en su turno de trabajo. A nivel balear, además, «queremos que se desbloquee la carrera profesional paralizada desde 2018», advierten. «Supongo que a nivel local no se dan por aludidos», dicen porque nadie se ha mostrado abierto al diálogo. De seguir así, empezarán otro tipo de medidas de presión como manifestaciones en la calle y se plantea la posibilidad de una huelga.