Pep Malagrava y Iván Sevillano junto a dos técnicos del Consell de Mallorca este jueves en el puente de la base militar de Jaime II, muy cerca de donde se pondrán las placas solares.

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Un total de 84 paneles fotovoltaicos, que estarán ubicados en la mediana de la Ma-20, abastecerán el sistema de iluminación del túnel de Gènova. Las placas aportarán una potencia en la red de 44 Kw y una producción anual estimada de 63.500 Kwh, lo que supone un ahorro de emisiones de 47 toneladas de CO2, según ha explicado este jueves el conseller insular de Mobilitat i Infraesctures, Iván Sevillano.

Los sistemas de autoconsumo estarán situados en la parte superior de la entrada del túnel, por lo que el cableado no tendrá que pasar por ningún carril de la carretera para alimentar la infraestructura. Según ha detallado Sevillano, la mediana tiene una amplitud de unos 16 metros y una orientación que hace viable y segura la instalación de placas fotovoltaicas por su máximo rendimiento y aprovechamiento energético. El proyecto cuenta con un presupuesto de 98.000 euros y un plazo de ejecución de cinco meses. El conseller ha señalado que la iniciativa es pionera en España y que apuestan por este modelo.

«Se tiene que apostar por este tipo de energía y qué mejor que hacerlo en lugares como estos que no solo permitirán ahorrar en la factura de la luz, sino que nos permite ser más sostenibles y ahorrar consumo de territorio», ha afirmado el conseller.

El director general d'Energia i Canvi Climàtic del Govern, Pep Malagrava, ha visitado el puente cercano que hay junto a la rotonda de la base militar Jaime II junto a Sevillano, ya que el proyecto surge de una colaboración conjunta entre las dos instituciones. «Desde el Govern siempre hemos dicho que estamos impulsando toda una serie de actuaciones en suelos antropizados como aparcamientos y cubiertas y ahora incorporamos estos nuevos espacios», ha afirmado.