El Parlament aprobó el pasado martes una proposición de reconocimiento a los descendientes de los judíos de Mallorca, los xuetes, que constata que los miembros de este colectivo «fueron asesinados, perseguidos, reprimidos y estigmatizados hasta bien entrado el siglo XX». La cámara autonómica recordará con una placa que en su propio emplazamiento se ubicó el Convent de Sant Domingo, cuna de la «ignominia».
Seis siglos conforman la historia de la discriminación, a veces sangrienta, a unos mallorquines por parte de otros mallorquines. Del asalto al call (así se conocía a las zonas habitadas por judíos en la Corona de Aragón) de Palma en 1391 y las conversiones de 1435 se llegó a los autos de fe de 1691, en los que se condenó a 88 personas por judaizantes. De éstas, 37 fueron ejecutadas y de éstas, tres, Rafel Valls y los hermanos Rafel Benet y Caterina Tarongí, fueron quemadas vivas. Las condenas dictadas por la Inquisición comportaban otras penas que debían mantenerse durante al menos dos generaciones, pero la estigmatización social fue mucho más allá de esas dos generaciones.
En esta discriminación tiene un papel fundamental la lista de los supuestos 15 apellidos xuetes: Aguiló, Bonnín, Cortès, Fortesa, Fuster, Martí, Miró, Picó, Pinya, Pomar, Segura, Tarongí, Valentí, Valleriola y Valls. Dejando aparte su vertiente discriminatoria, este listado (unas 20.000 personas llevan hoy en día alguno de esos 15 apellidos) no tiene ningún sentido, pues en Mallorca están documentados unos 330 apellidos de conversos y condenados por practicar el judaísmo. El listado de los 15 apellidos ha pesado en la sociedad mallorquina incluso más que una ley hasta tiempos muy recientes.
En general, los jóvenes actuales, incluso muchos de los que llevan alguno de los 15 apellidos, desconocen esta realidad del pasado. Se ha pasado de la discriminación a la ignorancia. La cuestión xueta apenas tiene trascendencia social hoy en día, pero no hace falta remontarse mucho tiempo atrás para haber vivido situaciones derivadas de esta discriminación. Los padres y los abuelos de estos jóvenes han conocido -y algunos, practicado- el rechazo social a los xuetes por razones que serían incapaces de explicar. Simplemente, porque llevaban alguno de los apellidos malditos.
Hace sólo unas décadas, la intención de casarse con una persona que llevara un apellido xueta era motivo de cisma familiar. En Mallorca ha habido bodas mixtas en las que la familia de cristianos viejos no ha asistido al enlace. Más allá de eso, también hace tan sólo unas décadas, algunas parejas mixtas decidieron casarse en la Península para contraer matrimonio en un ambiente libre de todos esos prejuicios.
Algunos xuetes (de cierta edad, todo hay que decirlo) comentan que en la actualidad, entre el círculo de amigos, todavía se les saluda con frases como Com va, xuetó? O la variable Com va, xuetonarro? Estos amigos alegarán que es en tono de broma y que no hay ninguna intención vejatoria, pero la verdad es que los destinatarios de esos saludos pueden no verle la gracia y acabar expresando su hartazgo. ¿Por qué al resto de amigos se les llama o saluda por su nombre o por su mote, y al que lleva un apellido xueta se le hace mención específica de esa condición?
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38 comentarios
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Som i seremTal cual los nacionalismos!!!
BounegreHay mucha rabia allí, me recuerda al carnicero sionista Ariel Sharon y su discípulo Netanyahu. Estás equivocado, no soy antijudío, ciertamente soy antisionista, al igual que los miles de judíos que están en las calles de Israel manifestándose contra los sionistas de extrema derecha como Netanyahu, Itamar Ben Gvir y sus otros compinches, los autores de el holocausto palestino y el apartheid del pueblo palestino.
C327841Cierto , prácticamente están todos los apellidos mallorquines actuales.
Som i seremCom els nacionalismes.
AuraNo estoy tan seguro que nuestra sociedad haya mejorado.Por supuesto en la cuestión xueta si.
MariaCert!
No se les ocurrirá apuntarse al carro de las subvenciones , tan de ¨moda¨en esta sociedad enferma !!!!! Ya se que recibiré negativos de gente poco leída y sin ánimo de justificar lo sucedido de ninguna manera , si es cierto que los ¨xuetas¨sabían a lo que se exponían en esos tiempos de intolerancia religiosa.La Inquisición no perseguía a los judíos , sino a los conversos acusados de ¨judaizar¨( seguir con su religión a pesar de haberse convertido , casi siempre por conveniencia/obligación ,al Cristianismo.) Un horrible ejemplo de radicalismo e intransigencia que afectó a toda Europa.(España no fué la peor)
Los últimos ramalazos antixuetes, por lo demás moderados, fue durante la crisis de suministros (1914-1918) cuando se les acusó de exportar bienes a los países beligerantes, lo que los encarecía o retiraba para los mallorquines. El descontento, sin embargo, se concentró más contra Joan March (manifestaciones y pedradas contra su banco).
ya lo dice el refran "pueblo pequeño infierno grande" por desgracia esto no es solo un tema de antijudaismo sino un tema que no debe hacer enternder que las sociedades cerradas llevan a casos como estos , en Mallorca todo el mundo o casi todo tenia y tienen más o menos sangre judia, pero los xuetas fueron la victima perfecta de los que eran politicamente correctos defensores del bien contra los malos . Esto nos debe hacer pensar quienes son los posibles candidatos a nuevos inquisidores, tal vez los veganos que muchoa de ellos han convertido una forma de alimentarse en una especie de religion, tal vez los animalistas en UK ya hay terroristas animalistas, los ultrafeministas que demonizan al que no esta de acuerdo con ellos , bueno Dios dira pero que no lo diga tan tarde
TomeuJo foraster??? Betuadeu sagrat!!! No, no y no!!! Tengo más de treinta apellidos mallorquines, impares, porque algunos son repetidos. Pero si fuera foraster no me importaría. No soy xenófobo ni racista, como usted y los supremacistas catalanes.