Imagen de archivo de un aula vacía de un instituto | Gemma Andreu

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A partir del mes de septiembre, y coincidiendo con el inicio del próximo curso escolar, la figura del psicólogo estará presente en los centros de Secundaria. Así lo ha anunciado el conseller de Educació, Antoni Vera, quien ha explicado que es un compromiso adquirido «viendo las demandas de todos los centros».

A día de hoy existe la figura del orientador escolar que, en caso de detectar un problema con algún alumno solicita la intervención rápida de un psicólogo, sin embargo, «necesitamos estar dentro del centro para intervenir», ha explicado Vera. «Muchas veces el perfil del orientador es académico», ha añadido.

Ésta es una de las primeras medidas que tomará el Govern enmarcadas dentro del Pla Estratègic Interinstitucional de Salut Mental que se está elaborando con la participación de 2.000 profesionales y las consellerias de Salut y Afers Socials, además de Educació. El documento estará listo en diciembre de este año y sumará también a la dirección general de Esports, tal y como ha explicado la presidenta, Marga Prohens, en declaraciones posteriores a una reunión de análisis en el Consolat.

«Pondremos la figura de los psicólogos en los colegios a partir de septiembre porque es una carga que los profesores no pueden asumir y, tal y como está la situación, no podemos esperar a diciembre para hacerlo», ha dicho Prohens.

La presidenta ha lamentado que los problemas de salud mental en la infancia y la adolescencia se han incrementado un 60 % en los dos últimos años. No sólo eso, «las tentativas de suicidio o autolíticas se ven cada vez en edades más tempranas». Prohens ha destacado la necesidad de prevenir y anticiparse a este tipo de conductas.

Para sostener este argumento ha seguido dando cifras como que una de cada cuatro personas sufrirá un trastorno de salud mental a lo largo de su vida; que el 061 atiende a diario una media de diez tentativas de suicidio o que más de un centenar de personas acabaron con su vida en 2022.

En la actualidad se calcula que unas 150.000 personas residentes en Baleares están tomando ansiolíticos o antidepresivos con prescripción médica, una cifra que ha ido incrementándose en los últimos años. De ahí que Marga Prohens haya definido la estrategia para afrontar los problemas de salud mental como algo prioritario. Este Govern, de hecho, ha creado una dirección general autonómica «pionera», ha destacado la presidenta.