TW
0

La detención de los dos miembros de ETA se produjo a las 03.30 horas de la madrugada cuando una patrulla de la Guardia Urbana sospechó de un vehículo Renault 19, robado el 7 de diciembre en L'Hospitalet, que circulaba por la Avenida del Paralelo de Barcelona y que presentaba en la puerta señales de haber sido forzado y la matrícula torcida. Ante estos indicios, los agentes "un hombre y una mujer" obligaron al conductor a detener el vehículo en un semáforo de la confluencia de la Avenida Paralelo con la calle Josep Carner con la excusa de que llevaban una puerta mal cerrada.

Al acercarse al coche, el agente sospechó de un paquete colocado en el asiento posterior, en el que viajaba la mujer detenida, por lo que desenfundó su arma, mientras la agente le cubría. Los dos etarras se identificaron como miembros de la organización terrorista al verse sorprendidos y no ofrecieron resistencia aunque advirtieron de que iban armados y que transportaban 15 kilos de explosivos. La operación policial continua abierta para intentar detener a un tercer miembro del 'comando Barcelona' y localizar también la infraestructura que utilizaban los terroristas en la capital catalana.

El director general de la policía, Juan Cotino, confirmó la participación de Cruchaga, de 37 años, en todos los atentados cometidos por el 'comando Barcelona' en Catalunya en los últimos meses, que costaron la vida a cuatro personas. Cruchaga apareció en un informe que la Guardia Civil remitió a la Audiencia Nacional con motivo de la desarticulación del comando Vizcaya de ETA en 1997, pero no hubo indicios para su imputación.

Por su parte, Liarni Armendáriz y González de Langarica, de 27 años, que se identificó en un primer momento como Ohiane Errazquin, es una presunta miembro legal "no fichada" de ETA, según informaron fuentes de la lucha antiterrorista.