Cae el número uno de ETA tras otro sangriento atentado

Los dos fallecidos son José Angel Santos Larrañaga, de 40 años, residente en Andoain, y Josu Leonet Azkune, de 31, natural de Tolosa, quien, según el portavoz de EH, Arnaldo Otegi, era «probablemente» miembro de esta plataforma política, si bien su familia afirmó que era una persona «total y absolutamente apolítica».

José Angel Santos era un empleado de la empresa Beysa, una contrata de la compañía Elektra, en la que trabajaban Leonet y los también heridos Igor Larrea Olano, vecino de Legorreta y de 28 años; y José Ignacio Urrestarazu Urkola, natural de Tolosa y de 30 años; mientras que el último afectado por la explosión es el operario de «Carrocerías Plaza» Ignacio Urdangarín, de 39 años.

El atentado se produjo minutos antes de las ocho de la mañana, cuando Iñaki Dubrueil y su escolta, que no resultó herido, descendieron del tren en el apeadero del barrio donostiarra de Martutene, junto a un grupo de trabajadores que, como el edil socialista que es profesor en un centro ocupacional, acudían a sus puestos de trabajo en un polígono industrial cercano.

En ese instante, los terroristas activaron un artefacto compuesto por entre cinco y seis kilos de explosivo que, según fuentes de la investigación, habían preparado en un turismo Renault-18 de color verde estacionado en las proximidades. La explosión produjo una enorme humareda blanca y un gran estruendo en la zona, que hizo vibrar las paredes de uno de los dos centros escolares situados en las inmediaciones que iban a abrir sus puertas una hora más tarde.

La deflagración tiró por el suelo a los heridos, según un testigo, que pudo ver el coche bomba en llamas, completamente destrozado, mientras llegaban al lugar varias dotaciones de la Policía, entre ellas varios agentes de la cárcel de Martutene, muy próxima al lugar de los hechos.