José María Aznar se mostró en todo momento muy sonriente, mientras Rodríguez Zapatero y Arenas se saludaban.

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En el Palacio de La Moncloa, Aznar, Rodríguez Zapatero y Arenas firmaron formalmente el acuerdo de reforma de la Justicia. Primero lo hicieron los secretarios generales de ambos partidos, mientras el presidente del Gobierno, muy sonriente durante todo el acto, esperó con paciencia su turno para estampar su firma en todos los documentos. El ministro de Justicia, Angel Acebes, también estuvo presente, así como los interlocutores socialistas: el secretario de Libertades Públicas y Desarrollo Autonómico, Juan Fernando López Aguilar, el portavoz del PSOE en el Congreso, Jesús Caldera, y el portavoz en materia de Justicia, Javier Barrero.

Tras el acto, comparecieron en los jardines de La Moncloa Arenas y López Aguilar. El dirigente socialista invitó al resto de partidos políticos a que participen en la Comisión de Seguimiento que vigilará el desarrollo de este acuerdo. El objetivo más inmediato de esta comisión, dijo, debe ser establecer un calendario de objetivos prioritarios y de inversiones, que estén incluidas en los Presupuestos del Estado para el año 2002. López Aguilar confía en que el resto de partidos colaboren a hacer duradero el acuerdo. «El PSOE espera hacerlo desde la oposición hasta el año 2004, y desde el Gobierno a partir de entonces», añadió, convencido de una próxima victoria electoral de su partido. A corto plazo, dijo, es imprescindible empezar a adaptar el acuerdo a la realidad.

Por su parte, Arenas, felicitó a Acebes por haber dirigido la negociación del «histórico» acuerdo, que responde a la petición expresada por una mayoría de la sociedad española. Este pacto, así como el antiterrorista y el de pensiones, explicó, demuestran la capacidad de diálogo del Gobierno en materias que deben estar por encima de los intereses de los partidos. Además, el contenido de este nuevo pacto de Estado, según dijo Arenas, cumple el programa electoral del PP.

Este nuevo acuerdo de Estado entre PP y PSOE vuelve a tener enfrente al PNV. El portavoz del partido nacionalista en el Congreso, criticó la firma del acuerdo que tuvo lugar en La Moncloa. «Que PP y PSOE hagan en La Moncloa un acto público de exclusión, indudablemente, habla muy poco de la calidad de esta democracia, porque una democracia bien asentada se distingue no sólo por las mayorías, sino por el respeto a las minorías», dijo. Esa falta de respeto a las minorías, dijo, y la «insólita» actuación de populares y socialistas, son motivos más que suficientes para no firmar el acuerdo. Según fuentes del partido, el PNV no se sumará a este acuerdo, ya que sólo está encabezado por PP y PSOE, cuando, según Anasagasti, su partido «tiene mucho que decir sobre la justicia en general y sobre las competencias que tienen».