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OTR/PRESS-SAN SEBASTIÀN El entierro de la etarra Olaia Castresana se convirtió para el portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, en una exaltación de la lucha armada de ETA. El líder abertzale, que concluyó su intervención con el lema de la banda terrorista, calificó a la etarra muerta de «gudari», e incluso ensalzó a los que «han caído en esta larga lucha» por la autodeterminación, tendrá que hacer frente por ello a una nueva querella por apología del terrorismo. Así lo ordenó el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, al Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

Cientos de personas se congregaron en el donostiarra cementerio de Polloe para despedir a la etarra Olaia Castresana, que en Torrevieja murió manipulando un explosivo que pretendía utilizar dentro de la campaña de verano de ETA contra intereses turísticos. Sobre el féretro se colocó una tela con el lema de ETA, 'Bietan jarrai' ('Seguir en las dos vías'). Los asistentes, entre los que estuvieron destacados dirigentes de Batasuna como Joseba Permach, o de LAB, como Rafael Díez Usabiaga, corearon numerosas consignas en favor de la banda terrorista como «Gora ETA militarra», «El pueblo no lo perdonará», «Olaia, gudari, te recordamos» e, incluso, «PNV culpable».

Arnaldo Otegi intervino en el acto para destacar el importante papel que ha jugado la izquierda abertzale en el debate sobre la autodeterminación, cuestión ahora sobre la mesa gracias a la iniciativa del lehendakari, Juan José Ibarretxe. Más concretamente, y a modo de agradecimiento pidió para «todos los gudaris que han caído en esa larga lucha por la autodeterminación nuestro aplauso más caluroso», ya que «sin vosotros no habría sido posible». «Los gudaris de ETA se nos van con la dignidad silenciosa y la suerte solitaria», dijo, de la misma forma que ha muerto Olaia Castresana.

Otegi dirigió sus críticas a los partidos políticos vascos por no entender que «es una generación nacida en el Estatuto la que se adhiere a la lucha armada para expresar su compromiso político», y vaticinó que apostar por el Estatuto, como ha el PNV y el nuevo Gobierno vasco, «sólo conlleva la prolongación del conflicto en este pueblo», como, a su juicio, demuestra la muerte de Castresana. También vaticinó Otegi que «la lucha de Euskal Herria continuará, aunque siga siendo muy dura, porque pasa de generación a generación y de mano a mano». Esa lucha, añadió, «es lo más importante para el futuro de Euskal Herria». Eso sí, dijo que la izquierda abertzale sufre por esta lucha y no desea que esta situación continúe, ya que «el sentimiento que mueve a los militantes de ETA es el amor al pueblo, al compromiso y a la militancia».