Nuevas implicaciones del ex secretario de Estado Enrique Giménez Reyna en Gescartera.

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En una entrevista concedida a un diario económico, añade que el director general de supervisión de la Comisión Nacional del Marcado de Valores (CNMV), Antonio Botella, era amigo de Camacho y que diversas personas de la institución recibieron regalos, que no consta que se hayan devuelto. En una entrevista a 'Expansión' el abogado de Camacho hace un repaso de la relación de su defendido con personalidades del Gobierno y de la CNMV.

Así por ejemplo asegura que el despacho del que era socio Giménez Reyna antes de su incorporación a la Agencia Tributaria, no sólo prestó servicios de asesoramiento a Gescartera, sino que también probablemente lo hizo para su antecesora, Bolsa Consulting. No obstante, añade que esto no supuso un posterior trato de favor, ya que varias empresas propiedad de Camacho fueron inspeccionadas.

Sobre su relación con el diputado del PP y ex vicepresidente de la CNMV, Luis Ramallo, afirma que «lo único que sé es que actuó como notario de Gescartera en varias ocasiones y que intermedió en una posible venta de la agencia». En cualquier caso, cree que este hecho «no debe descontextualizarse» pues miembros de la CNMV «recibieron regalos de Gescartera, incluida la presidenta, Pilar Valiente», regalos que, según Lozano, «no consta» que fueran devueltos.

Lozano también se refiere a los almuerzos entre Valiente, Camacho y Pilar Giménez Reyna, sobre los que dijo que con ellos «unos trataban de acercarse al mundo del poder y otros al mundo del dinero». En cualquier caso, asegura que «Giménez Reyna tenía una buena relación con Camacho desde 1989 o 1990, independientemente de la existente entre Camacho y su hermana».