Xabier Arzalluz, durante el acto celebrado en Bilbao con motivo del Aberri Eguna.

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AGENCIAS-BILBAO
El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, centró gran parte de su intervención con motivo del Aberri Eguna en criticar a los socialistas y, especialmente, al PP y al presidente del Gobierno, José María Aznar.

Arzalluz intervino por la mañana en otro mitin en la localidad vascofrancesa de San Juan de Luz donde rechazó las críticas vertidas por ETA en su último comunicado en el que acusaba al PNV de haber convertido el Aberri Eguna en un «pic-nic abertzale».

Criticó a populares y socialistas por defender un Estatuto que, dijo, no han querido completar y aseguró que el respeto del PSOE a los acuerdos alcanzados en el pasado «tiene una caducidad menor que la del yogur».

Aseguró que PP y PSOE están en contra de la propuesta de Ibarretxe y «de cualquier plan que salga de nosotros, que sea una expresión de nacionalistas y que, por lo tanto, contenga elementos más serios de autogobierno que los que tenemos hasta ahora».

Advirtió a los socialistas de que si tras las elecciones, en aquellos lugares en los que PNV-EA hayan resultados vencedores, dando su respaldo a grupos minoritarios «no lo vamos a olvidar y no les daremos nuestro voto cuando ellos lo necesiten, quizá en el 2004».

«Será un día hermoso para Euskadi, para nuestra patria, el que ETA deje la pistola y haga un pic-nic», insistió Arzalluz, quien sostuvo que el PNV «tiene la legitimidad del pueblo».

«Esa es nuestra pistola, eso no lo tiene ETA», advirtió el presidente del PNV dirigiéndose a la organización terrorista, a la que exigió que deje las armas porque su violencia «avergüenza» a los vascos y va en contra del propio pueblo.

Además, aseguró que su objetivo es que lo vasco sea «un concepto» en Europa, motivo por el que, según dijo, «París está nervioso» y «con Madrid casi estamos en guerra».

Por su parte, el lehendakari se comprometió a seguir adelante «con todas sus fuerzas» para materializar su propuesta y señaló que «sólo dará pasos atrás para coger carrera».

Ibarretxe realizó un llamamiento a las instituciones y partidos a «arriesgarse» y aseguró que, finalmente, «los vascos serán lo que quieran ser». Con este fin, afirmó que presentará el próximo mes de septiembre su plan en el Parlamento vasco, para someterlo después a «una consulta democrática». «Vamos a seguir por ese camino», aseveró.