Aznar y Rajoy, junto a Arenas y Mayor Oreja en la reunión del Comité Ejecutivo del PP.

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El presidente del Gobierno y del PP, José María Aznar, adelantó ayer que cederá todos los poderes que le corresponden como máximo responsable de su partido a Mariano Rajoy, quien aseguró que pretende dar continuidad al proyecto político encabezado por el jefe del Ejecutivo.

Aznar y Rajoy expresaron esas intenciones en la reunión que mantuvo la Comisión Ejecutiva Nacional del PP para recibir la propuesta del presidente del partido de que Rajoy sea su sucesor como candidato a la jefatura del Gobierno.

La reunión se convirtió en una sucesión de intervenciones de los dirigentes del PP en las que se elogió la decisión de Aznar y la capacidad de Rajoy para conducir al partido a una nueva victoria en las urnas en las elecciones generales de marzo del próximo año.

Aznar aprovechó este foro para despejar dudas sobre sus intenciones de futuro en torno a la dirección del PP y asegurar que «mi decisión de marcharme es completa. No me voy a medias -prosiguió- Si se aprueba la decisión que voy a someter a vuestra consideración, tengo intención de ceder al candidato y secretario general todos los poderes que los Estatutos me atribuyen como presidente». Aclaró, en este sentido, que no seguirá presidiendo las reuniones del Comité Ejecutivo del partido, y traslada esa responsabilidad, al igual que el resto de funciones que desempeña a Mariano Rajoy.

Aznar garantizó que no habrá ningún tipo de bicefalia, sino continuidad y relevo, y subrayó que la prolongación personalista de los liderazgos políticos es perjudicial para los partidos y genera tensiones innecesarias en el país.