Javier Arenas, durante la reunión que mantuvo ayer con el portavoz popular en el Congreso.

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El PSOE ya se siente «desvinculado del Pacto de la Justicia». De esta forma anunció el secretario socialista de Libertades Públicas, Juan Fernando López Aguilar, la ruptura de los acuerdos firmados en esta materia con el Gobierno, al que acusó de haber perdido «una oportunidad histórica» y de haberse instalado «en el truco y en la trampa».

«Es el Gobierno el que manifiesta desprecio por sus compromisos y, por tanto, el PSOE no puede sentirse vinculado», añadió, al tiempo que criticó la actitud del Ejecutivo, que «demuestra que desprecia el instrumento que lleva la firma del presidente José María Aznar». Además, los socialistas creen que la responsabilidad de la pérdida de credibilidad del Pacto radica en el Gobierno, por ser el principal gerente del mismo a través de los Presupuestos Generales del Estado o la adjudicación de medios a la Justicia.

López Aguilar aseguró que el PSOE «no puede sentirse vinculado en el acompañamiento a un Gobierno que se ha desentendido de los compromisos del Pacto, como están constatando de manera fehaciente los ciudadanos». Los socialistas critican que el Ejecutivo no se sienta obligado a utilizar su instrumento de seguimiento, la comisión que forman todos los grupos parlamentarios y que el PSOE ha insistido sin éxito en convocar en las últimas semanas.

López Aguilar aseguró que el PSOE es leal con lo que firma y considera la Justicia como un servicio público esencial. Por eso, anunció que los contenidos del Pacto serán la base del programa del partido en las elecciones generales de 2004. «Esos compromisos continúan pendientes de cumplimiento, y son congruentes con las posiciones del PSOE», dijo, convencido de que la utilidad del pacto pasa por su cumplimiento, «no sólo para que aparezca en el Telediario o en el BOE».