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El Plan Ibarretxe ha superado su primer escollo legal. La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha desestimado la suspensión cautelar del Plan Ibarretxe, tal y como había demandado el sindicato Manos Limpias. Su portavoz, Miguel Bernard, acusó al Tribunal de actuar «con miedo» y de haber quedado «totalmente desprestigiado» con esta decisión.

Este Tribunal ha dado la razón al Gobierno vasco, que consideró que Manos Limpias no tenía legitimación para recurrir el acuerdo que adoptó el pasado 25 de octubre, por el que aprobó el Plan Ibarretxe. Considera el tribunal que existe una falta de concreción y fundamentación en los perjuicios que puede sufrir Manos Limpias si no se suspende el proyecto nacionalista. El recurso de la asociación era contra el «acto administrativo» por el que se aprobó el Plan Ibarretxe. El Gobierno vasco explicó en sus alegaciones que la Jurisdicción contenciosa no es la competente para decidir sobre esta cuestión y aseguró que la aprobación de la propuesta no podía suspenderse porque ya había sido ejecutada y trasladada al Parlamento vasco.

Aunque el Tribunal desestima la petición de Manos Limpias de paralizar el Plan Ibarretxe, todavía no ha decidido la impugnación del recurso, que continúa su tramitación. El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco admitió a trámite la querella interpuesta por Manos Limpias contra el acuerdo del Ejecutivo vasco, y abrió incidente de suspensión.

Por otra parte, el PP rechazó los dos escritos del PSOE e IU, apoyados por los demás grupos de la oposición, para que la Mesa del Congreso reconsiderara su negativa a no impedir la tramitación de la reforma del Código Penal impulsada por el Gobierno en el Senado para combatir el denominado Plan Ibarretxe. Los populares justificaron su decisión, tanto en la Mesa de la Cámara como en la Junta de Portavoces, alegando que el Senado tiene competencia legislativa plena. La oposición dejará hoy constancia de su rechazo a esta reforma durante la votación en el Pleno del Congreso.