Fotografía de archivo de la furgoneta hallada el 11-M en Alcalá de Henares.

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La sesión a puerta cerrada de la comisión de investigación sobre los atentados del 11-M, en la que se analizaron documentos clasificados, ha abierto numerosos interrogantes. Algunos grupos minoritarios creen que lo que han visto puede suponer que la pista del terrorismo islámico se siguió desde el primer momento, en contra de lo que defendió el Gobierno del PP. Así, un informe del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) asegura que los detonadores hallados en la furgoneta que utilizaron los terroristas en Alcalá de Henares estaban a la vista y no ocultos.

Otro informe habla sobre la cinta de audio que también se halló en la furgoneta. Este cassette contiene salmos coránicos «muy belicistas», que habían sido utilizados en anteriores acciones terroristas. El CNI asegura en este mismo informe que la furgoneta utilizada por los terroristas constituía «una reivindicación» en sí misma. Àngel Acebes, en la rueda de prensa que como ministro del Interior dio para informar del hallazgo de la furgoneta, insistió en que ETA seguía siendo la línea principal de investigación.

Los diputados que trabajan en la comisión de investigación sobre el 11-M estudiaron 22 documentos clasificados del Centro Nacional de Inteligencia. Joan Puig, portavoz de ERC, aseguró que la sesión secreta abre la posibilidad de que la pista del terrorismo islámico estuviera sobre la mesa desde la misma mañana del 11-M.

El portavoz del PNV, Emilio Olabarria, incidió en la furgoneta de Alcalá de Henares. Documentos del CNI aseguran que los detonadores hallados estaban a la vista. Este punto supuso la primera polémica de la comisión, ya que el portero de finca que alertó de la furgoneta, Luis Garrudo, dijo que agentes de la Policía ya dijeron en la mañana del día 11 que habían visto estos detonadores.

De ser cierta la versión de Garrudo, así se explicaría por qué la Policía no abrió las puertas laterales del vehículo para inspeccionarlo, sino que forzó la trasera. Un informe de la Dirección General de la Policía, estudiado ayer por la tarde contradice los documentos elaborados por el CNI. La policía afirma que se descubrieron a las 15.30 horas en el complejo policial de Canillas, en Madrid.