Conde Pumpido, aunque ha dado órdenes de abrir diligencias, duda que se cometiera un delito.

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La Fiscalía investigará si se produjo un delito de enaltecimiento del terrorismo en el acto celebrado ayer por Batasuna, cuya propuesta de «sacar de las calles» el conflicto vasco sin pedir el fin de ETA fue rechazada por todos los partidos, incluso los más próximos ideológicamente a la formación abertzale.

Según informaron fuentes del ministerio público, la Fiscalía de San Sebastián abrió ayer diligencias informativas para esclarecer lo ocurrido en el acto celebrado el domingo por Batasuna en el velódromo donostiarra de Anoeta, donde supuestamente se profirieron gritos de apoyo a ETA y se homenajeó a miembros de la banda terrorista.

La decisión se adoptó en comunicación con la Fiscalía General del Estado, según las mismas fuentes, que añadieron que el evento del domingo no precisaba autorización de la Consejería vasca de Interior, ya que se celebró en un recinto cerrado y sólo existe obligación de comunicar los actos de «reunión» o «manifestación» en la vía pública.

El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, manifestó ayer que el acto «se ha celebrado al amparo del derecho reconocido constitucionalmente de libertad de reunión y ha sido de contenido político, y no expresamente vinculado a una actividad electoral, que es lo que tiene prohibido Batasuna», aunque las diligencias aclararán si se cometió algún otro delito.

La decisión de la Fiscalía se conoció después de que el presidente del Tribunal Supremo, Francisco José Hernando, dijera que corresponde al fiscal general y al Parlamento actuar contra Batasuna y que el Alto Tribunal, que ilegalizó a esta formación, no puede intervenir «mientras no tenga conocimiento de forma fehaciente de los incumplimientos de determinadas resoluciones judiciales».