Mohamed Douha y Majid Bakkali son dos de los componentes de la célula islamista detenidos.

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OTR/PRESS-EFE - MADRID
Majib Bakkali y Mohamed Douha, los dos presuntos terroristas islámicos detenidos la pasada semana en la provincia de Barcelona, pretendía cometer atentados estas Navidades en España o en Marruecos, según ellos mismos declararon ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu. Ambos se encuentran ya en prisión, pese a que afirmaron que no forman parte de un grupo terrorista ya establecido. Sí admitieron, en cualquier caso, que contactaron con un ciudadano checo que les ofreció «un buen negocio», en el que las versiones de ambos discrepan.

Son tres los presuntos terroristas que ya están encarcelados. Además de Bakkali y Douha, interrogados por el juez Andreu, el magistrado Ismael Moreno envió a prisión tras tomarle declaración ayer a Mustafá Farhorui, a quien se detuvo el pasado viernes a raíz de los testimonios de los primeros detenidos. Quedó en libertad Abdelkader Farhorui, primo del anterior, puesto que se no pudo determinar su relación con propósitos terroristas.

Según fuentes jurídicas, Bakkali y Douha pretendían comprar explosivos para cometer atentados estas Navidades en España o en Marruecos. A lo largo de sus declaraciones, ambos negaron pertenecer a ningún grupo terrorista, aunque sí admitieron que contactaron en Barcelona con un ciudadano checo que les «ofreció un buen negocio». Esta información la corroboran las autoridades marroquíes, que ya habían dictado órdenes de busca y captura para ambos. Bakkali y Douha discrepan a la hora e detallar el objeto del citado «negocio».

Uno de ellos explicó al juez Andreu que les había ofrecido oro, mientras que el segundo dijo que se trataba de mercurio rojo, un material procedente del este de Europa altamente radioactivo que puede ser utilizado para fabricar artefactos explosivos. Mustafá Farhorui, por su parte, negó ante el juez Moreno que forme parte de ninguna célula islamista, aunque el magistrado decretó su ingreso en prisión.

Tras realizarse la operación, las fuerzas de seguridad informaron de que la célula terrorista desarticulada en diversas localidades de la provincia de Barcelona estaba efectivamente intentando comprar explosivos en el Este de Europa.

Bakkali viajó a Marruecos para desde allí gestionar la compra. Al parecer, había llegado ya por medio de un intermediario y desde Chequia una muestra del material que se encontraba en mal estado.

El «mercurio rojo» es una misteriosa sustancia altamente radiactiva desarrollada por científicos rusos durante la Guerra Fría que puede utilizarse para fabricar las denominadas «bombas sucias», cuya elaboración es relativamente barata y que no necesitan plutonio o uranio enriquecido, sino que pueden ser armadas con otras sustancias a partir incluso de un artefacto a base de dinamita.