La Familia Real se acercó ayer a las urnas para pronunciarse sobre
la Constitución Europea, la cuarta vez que ejercen su derecho al
voto desde 1976. Los Reyes estaban en el centro público Monte del
Parto a las 9.30, pocos minutos después de que se abrieran las
urnas. A lo largo de la mañana también depositaron su voto en el
mismo centro los príncipes de Asturias y la infanta Elena. Los
duques de Palma votaron en la Facultad de Derecho de la Universidad
de Barcelona.
Esta es la cuarta ocasión en que los monarcas se pronuncian en
un referéndum desde el año 1976. Ese año se celebró la consulta
sobre la reforma política. La segunda vez que se acercaron a votar
fue el 6 de diciembre de 1978, en el referéndum sobre la
Constitución y la tercera en 1986, cuando se preguntó por la
permanencia de España en la OTAN.
La presencia de los Reyes ayer en el colegio electoral estuvo
marcada por el desenfado y no estuvo exenta de anécdota. Nada más
entrar, los monarcas saludaron a los miembros de las mesas de la
sala donde debían votar. «Hoy os han quitado de dormir», les dijo
sonriente don Juan Carlos. Entre broma y broma, el Rey se olvidó de
enseñar su carnet de identidad a la presidenta de la mesa antes de
depositar la papeleta, un detalle del que tuvo que advertirle la
Reina.
Doña Sofía, que vestía un traje de chaqueta y pantalón rojo,
también tuvo su lapsus particular ya que cuando fue a sacar el
sobre se percató de que lo había olvidado y tuvo que ir a buscar
una papeleta. Los Reyes se despidieron de los integrantes de las
mesas deseándoles «que no se les hiciera muy largo el día».
Poco después llegó la infanta Elena al mismo centro. En torno a
las diez de la mañana y vestida de manera informal, la Infanta
depositó su voto y deseó a los miembros de la mesa «que fuera bien
el día». La Infanta acudió sola puesto que al parecer, don Jaime de
Marichalar votó por correo.
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