El presidente de la confederación Católica de Asociaciones de
Padres (Concapa), Luis Carbonel, aseguró ayer que las previsiones
de participación para la manifestación contra la LOE convocada para
hoy en Madrid se han visto desbordadas y manifestó que todos los
convocantes acuden «entusiasmados con tantos apoyos y tantas
llamadas e ilusionados por la reacción de toda España».
Con este animado 'planning', el presidente de la Concapa prevé una
participación desbordante y consideró fantástico la presencia
confirmada de algunos obispos en la madrileña Plaza de Neptuno,
porque, a su juicio, significa que también los miembros de la
Iglesia «defienden la Constitución que garantiza a los padres el
derecho a educar a sus hijos conforme a sus convicciones
católicas». La Conferencia Episcopal Española (CEE) asegura no
saber cuántos obispos acudirán a la marcha, pero señala que tienen
«absoluta libertad» para decidir si participa o no, algo que sirve
para el resto de manifestaciones.
La manifestación comenzará en la Plaza Neptuno de Madrid a las
17:00 horas, contará con el respaldo de 710 agrupaciones, muchas de
ellas internacionales, que cuentan con más de 100 millones de
familias en 23 países europeos. Según los organizadores, más de 200
millones de personas de 12 países diferentes de Iberoamérica
también han mostrado su apoyo a la marcha. Además, se desplazarán a
Madrid un total de 520 autocares y dos vuelos procedentes de las
Islas Baleares y de las Canarias. Al término de la manifestación
tendrán lugar conciertos y espectáculos, con la canción de la LOE a
ritmo de rumba: 'borriquito como tú, que no sabes ni la u'.
Lo que sí se ha conocido es que el presidente de la Conferencia
Episcopal Española y obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, no
participará en la manifestación, como tampoco lo harán los obispos
de Vitoria y San Sebastián.
«Quien diga que no se recoge el derecho de los padres a elegir
la Educación que quieren para sus hijos no está diciendo la verdad.
Y quien trate de enfrentar al Gobierno con la Educación privada o
concertada tampoco dice la verdad». Así de rotunda se mostró la
vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, al
defender el proyecto de la Ley orgánica de Educación (LOE).
De la Vega subrayó que en la entrevista que mantuvo el jueves
con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Angelo
Sodano, no se abordaron asuntos «coyunturales» como la
manifestación convocada en contra de la reforma educativa.
En conferencia de prensa al término del Consejo de Ministros,
Fernández de la Vega insistió en que la entrevista estaba enmarcada
en el ámbito del «diálogo político al más alto nivel» entre dos
Estados.
Sobre la decisión de no darle publicidad a la entrevista, afirmó
que la reunión se mantuvo «en el ámbito de la discreción» por
iniciativa del Vaticano y que el Gobierno lo asumió sin darle «la
mayor trascendencia».
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