El general croata Ante Gotovina, detenido el miércoles en la isla
canaria de Tenerife, compareció ayer ante la Justicia española
antes de ser entregado, presumiblemente hoy, al Tribunal
Internacional Penal para la ex Yugoslavia (TPIY), que le juzgará
por crímenes de guerra. El general fue trasladado en un avión
militar a Madrid, un día después de ser arrestado en un lujoso
hotel situado en la playa de las Américas, una de las zonas más
turísticas de Tenerife.
Gotovina está considerado como el responsable de la matanza de más
de 150 serbios en el sur de la región de la Krajina durante la
guerra de la antigua Yugoslavia y se le acusa de infracción de las
leyes o usos de guerra y de crímenes de lesa humanidad. Según el
TPIY, entre el 4 de agosto y el 11 de noviembre de 1995 Gotovina
ejerció el mando de todas las fuerzas croatas y dirigió todas las
operaciones ofensivas emprendidas en la llamada «Operación
Tormenta», iniciada el 4 de agosto de 1995, en el antiguo sector
sur de la zona protegida por las Naciones Unidas.
Compareció ante el juez de la Audiencia Nacional Félix Degayón,
que le informó de los cargos que existen contra él, ordenó su
ingreso en prisión y acordaró su entrega inmediata al TPIY, sin
necesidad de procedimiento de extradición. La Haya indicó que
espera que la entrega sea cuanto antes. La policía española había
iniciado las pesquisas para encontrarle en marzo de 2004, cuando se
hizo pública la acusación contra él en el tribunal de La Haya por
crímenes de lesa humanidad. El arresto de Gotovina, un general de
50 años, ocurrió en pocos segundos y sin que se produjera ningún
incidente. En el momento de su detención llevaba un pasaporte
croata falsificado a nombre de Kristian Horuat.
El Tribunal considera que entre julio y noviembre de 1995
supuestamente actuó por su cuenta o en connivencia con otros
individuos, o de ambos modos, para planificar, instigar, ordenar,
cometer o actuar de cómplice para la planificación, la preparación
o la comisión de matanzas, saqueo de bienes públicos o privados,
destrucción de ciudades, pueblos y aldeas sin motivo.
Al general, como autoridad superior, se le acusa de ser
responsable penalmente, principal o accesorio, de haber ordenado
estos actos a sus subordinados. La detención de Gotovina es la
primera en España de un reclamado por el TPIY, y obligará a aplicar
la Ley Orgánica 15/94 de cooperación con el Tribunal Internacional
para el enjuiciamiento de presuntos responsables de violaciones
graves del derecho internacional humanitario cometidas en la
antigua Yugoslavia.
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