El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, conversando ayer con el alcalde de la capital vizcaina, Iñaki Azkuna.

TW
0

EFE-BILBAO
Los obispos de Bilbao y San Sebastián, Ricardo Blázquez y Juan María Uriarte, reclamaron ayer que se den pasos que permitan fortalecer la esperanza de paz que tiene la sociedad vasca desde que ETA declaró el alto el fuego permanente.

Los dos prelados vascos se refirieron en sus homilías con motivo de la festividad de la Asunción de la Virgen a la necesidad de fortalecer la esperanza de la consecución de la paz, pero mientras que Uriarte apeló a «los principales responsables de la paz» en general, Blázquez se centró en pedir a los terroristas que reconozcan el mal que han causado a personas, a familias y al pueblo. También el obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, se pronunció en una entrevista en dos diarios vascos y consideró un «problema muy grave» que se «estén mezclando de forma peligrosa» la «supresión de la violencia» con el diálogo político para la normalización.

El obispo de Bilbao y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, aseguró que «la esperanza de la sociedad» por el alto el fuego declarado por ETA «será ciertamente fortalecida si los terroristas reconocen el mal que han causado a las personas, a las familias y al pueblo».

En la homilía que pronunció en la basílica bilbaína de Begoña, el prelado pidió «al Señor, por medio de la Amatxo de Begoña», patrona de Vizcaya, que «conceda a los terroristas el valor para pedir perdón a quienes han sido víctimas de sus acciones».