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El Gobierno español anunció de qué manera suavizará las condiciones impuestas a E.ON en su oferta por Endesa. El Ministerio de Industria eliminó las obligaciones de desinversión o cesión de activos de la eléctrica española impuestas a E.ON por la Comisión Nacional de la Energía (CNE).

Además, Industria reafirma la validez y plena aplicabilidad del real decreto ley de ampliación de las competencias de la CNE. Industria había avanzado que este fin de semana contestaría a los requerimientos de la Comisión Europea, que consideró contrarias a las normativas comunitarias 18 de las 19 condiciones impuestas a la OPA. Ahora el Gobierno español insiste en marcar las reglas del juego, y aunque retira gran parte de las condiciones que quiso poner a esta operación empresarial, se reafirma en la validez y aplicabilidad del real decreto que amplia las competencias de la CNE.

No obstante mantiene la condición relativa a la venta forzosa de la eléctrica si un tercero adquiere más del 50% de la compañía alemana porque «corresponde al derecho español».

La semana pasada, el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, ya avanzó que el Gobierno retiraría algunas de las 19 condiciones establecidas por el regulador energético sin aclarar cuales eran. Hoy se han puesto las cartas sobre la mesa. Finalmente Industria ha decidido dar marcha atrás y retirar la obligación de vender activos de Endesa que impuso a E.ON. Además, el grupo energético alemán tendrá que mantener los actuales compromisos de Endesa en la gestión, aprovisionamiento o inversiones en gas y electricidad. Industria ha querido mantener la clausula según la cual la alemana debería vender las acciones de Endesa si otra empresa toma el control de más del 50% de la compañía.