Los alimentos han sido los principales responsables del aumento de la tasa anual de la inflación en septiembre hasta el 2'7%, sobre todo por el encarecimiento de la leche, el pan y la carne de ave, a lo que se añade el incremento del 2'1% de los carburantes y los combustibles. El Indice de Precios de Consumo (IPC) subió el 0'3% en septiembre, lo que elevó la tasa interanual cinco décimas hasta el 2'7%, la más alta desde diciembre de 2006, y situó la inflación de los nueve primeros meses del año en el 1'7%.
La tasa de inflación subyacente, que excluye del índice general los precios de los alimentos frescos y de la energía, también aumentó el 0'3% en septiembre.
En cuanto a la subida mensual de los precios en septiembre, fue consecuencia, principalmente, del encarecimiento del grupo de vestido y calzado que, tras finalizar las rebajas, subió el 3'5%; seguida del alza de alimentos y bebidas no alcohólicas, con el 0'9%, y del transporte con el 0'3%. Por el contrario, sólo se abarataron los grupos de ocio y cultura, cuyos precios bajaron el 1'7%, y de hoteles, cafés y restaurantes, el 0'9%.
En los últimos doce meses la mayoría de los grupos que componen el IPC registran subidas superiores al dos por ciento, objetivo oficial de inflación para el conjunto del año. Por comunidades, los precios subieron el 2'9% en Cataluña, Comunidad Valenciana y Murcia; el 2'8% en Cantabria y el País Vasco; el 2'7% en Aragón y Castilla y León, el 2'6% en Andalucía, Asturias, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y La Rioja; el 2'3% en Galicia y Navarra y el 2'1% en Canarias. El IPC en Balears se mantuvo estable en septiembre, con lo que la tasa interanual se situó en el 2'5% y la acumulada en el 1'8%.
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