TW
0

El ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, anunció ayer que si el PSOE gana las próximas elecciones impulsará una reforma del sistema de acceso a la judicatura que permitirá a los licenciados con mejores expedientes académicos acceder a la carrera judicial sin necesidad de opositar.

El objetivo de esta reforma es paliar el «alarmante» descenso del número de personas que opositan para ser jueces o fiscales, ya que si en el año 2000 se presentaron más de 6.000 candidatos, en las últimas pruebas se han examinado menos de 4.000 licenciados, según explicó ayer el ministro Fernández Bermejo en un congreso sobre capacitación judicial en Barcelona.

Con esta reforma el Gobierno quiere atraer a la carrera judicial a los estudiantes con mejores expedientes de las universidades públicas, que son «gente que ha acreditado conocimientos jurídicos por encima de lo normal».

«La clave es pescar allí donde están pescando los grandes despachos de abogados. No veo por qué nos tenemos que dejar pisar. Hay que hacer una buena oferta y luego tiene que haber tiempos de formación muy buenos», ha subrayado Bermejo.

Al igual que los opositores, los licenciados que, por elección del Ministerio, se preparen para ser jueces o fiscales, ingresarán en la Escuela Judicial de Barcelona para formarse, durante un largo período de tiempo aún por determinar, «en valores, en práctica y, sobre todo, en vida».

«Me gustaría que los jueces pasaran por un tiempo por los servicios de urgencias de los hospitales y que conocieran lo que es la tensión en el trabajo. Pero que lo vivieran, no de paso», ha señalado el ministro, que apuesta por que los futuros profesionales acrediten también el conocimiento de las instituciones europeas y de alguna lengua extranjera. Actualmente el tiempo medio de preparación de los nuevos jueces es de cinco años y medio, en los que la mayoría de los opositores están «aislados» y «alejados de la realidad», manteniendo únicamente el contacto con sus preparadores, lo que «no es bueno», según Bermejo.