El líder del PP, Mariano Rajoy, parece haber moderado su opinión respecto al cambio climático. Si en octubre hacía referencia a su primo para restar importancia a las predicciones de «lo que va a pasar dentro de 300 años», ayer el líder de los populares presentó una batería de medidas para luchar contra el cambio climático que aplicará si es elegido presidente del Gobierno, entre las que se incluye el compromiso de plantar en la próxima legislatura 500 millones de árboles.
El PSOE ya ha echado las cuentas y advierte que plantar 14.000 árboles cada hora es un objetivo «complicado», a no ser que «quiera acabar con el desempleo en España por esa vía».
Durante su participación en la convención sobre cambio climático organizada por el PP Europeo (PPE), Rajoy subrayó que España es un país «especialmente vulnerable» a los efectos del cambio climático, con las consecuencias que esto podría tener sobre la economía o sobre la escasez de agua. «Combatir el cambio climático es también una de las mejores vías para mejorar el estado ecológico de España», sentenció el líder del PP, que matizó que su partido afronta el reto «sin dogmatismo ni alarmismos» y apostando por «la racionalidad y la sensatez de la moderación».
Rajoy anunció toda una batería de medidas que el PP, en caso de llegar al Gobierno el 9 de marzo, pondrá en marcha para «combatir» el cambio climático.
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