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MADRID. EFE. El candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Gaspar Llamazares, ha asumido hoy personalmente el «fracaso» de Izquierda Unida en estas elecciones y ha anunciado que no se presentará en la próxima Asamblea federal como coordinador general.

Llamazares, en una comparecencia a las 22.40 horas en la sede central de Izquierda Unidas, ha avanzado que propondrá a los máximos órganos de la federación la celebración de una Asamblea para elegir a un nuevo coordinador.

El líder de IU ha dicho que ha sido un «mal resultado» electoral y ha achacado esta situación a la «injusticia» del sistema electoral, al «tsunami bipartidista» de PP y PSOE y al «voto útil».

«Asumo toda la responsabilidad», ha afirmado el candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, que ha iniciado su comparecencia ante la prensa reconociendo que para su formación ha sido «un mal resultado».

Además ha querido remarcar su agradecimiento a la militancia por su «esfuerzo» en esta campaña electoral, sin la cual, ha añadido, no podría abordar el «tsunami» bipartidista.

Según Llamazares, gracias a la militancia su formación ha hecho una «gran campaña» intentando que se escuche su «voz» con «propuestas».
El coordinador general de IU también ha querido agradecer el «apoyo electoral que rondará el millón de votos» y ha calificado de «injusto» el actual sistema electoral.

Izquierda Unida, con más del 90 por ciento de los votos escrutados, ha conseguido 884.414 votos, lo que se traduce en un escaño en Madrid -el que corresponde al propio Llamazares- y dos en Barcelona, donde concurre conjuntamente con ICV.

Los dos escaños por Barcelona corresponden a Joan Herrera y Núria Buenaventura.
No obstante, el líder de la federación ha asumido el «fracaso» pero ha querido dejar claro que Izquierda Unida como «proyecto» no ha fracasado, sino que «sigue viva» y se pretende «revitalizar» a lo largo de los próximos meses.

«El resultado es insatisfactorio», ha añadido Llamazares, quien ha explicado que es un «fracaso político» para él como coordinador general de IU y candidato de la formación a la Presidencia del Gobierno.

Después de recordar que ha sido el candidato de IU con el «mayor apoyo», en referencia a su victoria en las primarias, ha afirmado que propondrá a los máximos órganos de la federación la convocatoria de una Asamblea en los próximos meses para «dar la palabra a la militancia».

Para el líder de IU la próxima Asamblea debe servir para la «participación», el «relanzamiento» y la «revitalización» del «proyecto imprescindible para la sociedad», a pesar del «tsunami bipartidista» y del «voto útil».

Llamazares, ha proseguido, le debe a su organización un próximo tiempo «de estímulo» y de «impulso» y no de «debate» sobre si seguirá en el cargo.
La próxima Asamblea será la de la «renovación» y la «revitalización», ha agregado Llamazares, quien ha insistido en que apoyará y colaborará con el próximo coordinador general.

Ha remarcado la «injusticia» del sistema electoral y ha criticado el «bipartidismo», que, a su juicio, supone un «golpe a la pluralidad política» y a Izquierda Unida.

Pero, según Llamazares, se va a revitalizar ese espacio a la izquierda del PSOE que aglutina a distintos movimientos de izquierda, ecologistas, pacifistas y feministas.

Llamazares, en su intervención, ha querido reconocer la «excelente» labor de su grupo parlamentario durante la legislatura y de los grupos municipales de su federación.

«El resultado no es justo», ha resumido Llamazares, quien ha afirmado que Izquierda Unida defenderá de forma «consecuente e intensa» su programa donde le toque estar en el Congreso, ya que previsiblemente perderán el grupo parlamentario.

Este programa servirá, ha afirmado, para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos, de la calidad del trabajo y se comprometerá con un «cambio de izquierdas».

Nada más terminar su intervención, que ha durado algo más de diez minutos, Llamazares ha abandonado la sede de Izquierda Unida aplaudido por los más de cincuenta militantes congregados en la madrileña calle de Olimpo.