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OMG El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, consideró hoy que los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) son el sistema que «más respeta» los puestos de trabajo y pidió a las autoridades que no exijan indemnizaciones de 45 días por año, ya que conduce a las empresas al «cierre definitivo».

Díaz Ferrán aseguró que este procedimiento es el «más saludable» en tiempos de crisis como el actual, ya que evitan que la reducción del consumo de bienes y servicios conduzca a las empresas al cierre total, una opción que «provocaría una pérdida mayor de puestos de trabajo».

Asimismo, el presidente de la CEOE reiteró que el principal problema de las pequeñas y medianas empresas españolas es que las entidades financieras continúan sin concederles los créditos necesarios para la tesorería y el capital circulante «con el que poder pagar las nóminas y a los proveedores a fin de mes».

«Sin esta financiación, hay muchas compañías que terminan inmersas en concursos de acreedores y eso conlleva una importante destrucción de empleo», añadió.

Gerardo Díaz Ferrán también un pacto de Estado en materia energética que permita relanzar la nuclear en España, como elemento dinamizador de la economía y el empleo en un momento de gran dificultad económica.

Así lo puso de manifiesto en la inauguración de las Jornadas de la Industria Nuclear en España que se celebran hoy en la patronal, donde consideró que España «no puede y no debe dar la espalda» a la industria nuclear ya que el país no puede prescindir de este tipo de energía, por tratarse de una de las más «eficientes, económicas y limpias».

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, afirmó ayer que el sindicato defenderá el mantenimiento del poder adquisitivo de los trabajadores españoles y «su mejora cuando sea posible» en el marco de la negociación colectiva de 2009. Por ello ha lanzado un duro ataque contra los empresarios que defienden las viejas recetas contra la crisis como el abaratamiento del despido, a los que llamó «saqueadores». Para los empresarios la solución no es tan sencilla y estiman que el descenso del consumo obliga a las empresas a reducir sus plantillas. Cándido Méndez lanzó un duro ataque contra los empresarios que defienden las «viejas recetas» contra la crisis, como el abaratamiento del despido.