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EFE/OTR-MADRID

El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que «la recuperación económica es el único horizonte» del Ejecutivo en 2009, que comparó con una tempestad de la que se mostró convencido que España va a salir porque viaja en un barco sólido que conoce su rumbo.

La lucha contra la crisis fue el eje del balance político del año realizado ayer por Rodríguez Zapatero en rueda de prensa tras el último Consejo de Ministros de 2008, en la que garantizó que el Gobierno buscará el acuerdo en materia de financiación autonómica.

La casi totalidad de su intervención giró en torno a lo que ha supuesto la crisis (de la que dijo que se están viviendo los momentos más graves) y a lo que afirmó, está haciendo y hará el Gobierno para salir cuanto antes de ella.

En ese contexto, reconoció que 2009 será un año difícil en el que, frente a lo que se propone desde algunos ámbitos, no va a renunciar a las políticas sociales, ya que considera que ahora son más necesarias que nunca.

Él está convencido de que España va a salir de esta situación y precisó que ese convencimiento no es fruto del optimismo, sino del realismo, porque considera que van a dar sus frutos la serie de medidas aprobadas por el Gobierno para afrontar la actual situación. Tras hacer un repaso de esas medidas aprobadas en los últimos meses, insistió en que el objetivo del Ejecutivo es que ningún parado quede sin protección.

En su repaso a la situación económica avanzó la posibilidad de reunirse en enero con banqueros para hablar de la reactivación del crédito. A corto plazo, Zapatero destacó otro objetivo, el de lograr un acuerdo con las Comunidades Autónomas sobre el nuevo modelo de financiación autonómica.

Ante ese reto, avanzó que es probable que el documento del Gobierno con su nueva propuesta, tras las conversaciones que ha mantenido con los presidentes autonómicos, se haga público antes de fin de año.

Entre los principios del nuevo modelo, destacó la equidad, la solidaridad, los estímulos para las Comunidades que generan mayor crecimiento económico, el reconocimiento de la población real y otras circunstancias singulares, en referencia a la petición del presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, para que se tuviera en cuenta el coste de la lengua cooficial.

Agregó que las autonomías que se verían beneficiadas serían Catalunya, Galicia, Balears y Comunidad Valenciana, y reiteró que es «probable que ese nuevo criterio tenga una relevancia en el modelo de financiación».