TW
0

AGENCIAS Dentro de la operación, ha sido detenido en Bilbao el abogado Iñaki Goyoaga y en la cárcel de Huelva la novia de un preso que había ido a realizar una comunicación con el recluso. Además, fuera del recinto penitenciario, han sido detenidos Inge Urrutia, novia de otro de los presos implicados en la fuga.

Los etarras que están siendo investigados anoche son Igor Solana Matarrán, antiguo miembro del «comando Andalucía», que se encuentra encarcelado en Valencia desde el pasado mes de febrero aunque hasta entonces estaba en Huelva; Jorge García Sertutxa, condenado por intentar matar al Rey en Palma de Mallorca en 1995, que se encuentra en Huelva; y Arkaitz Goikoetxea Basabe, miembro del «comando Vizcaya», que se encuentra en Valdemoro desde el pasado 6 de mayo.

Fuga rocambolesca

Al parecer, la banda lo tenía todo planeado. Comandos de ETA intentaron rescatar a dos presos de la organización terrorista de la cárcel de Huelva secuestrando al piloto de un helicóptero y utilizando el aparato para la evasión. Según las investigaciones, los terroristas realizaron preparativos en dos años diferentes sin conseguir en ningún momento sus propósitos.

Los viajes realizados a Portugal por miembros de la organización terrorista tenían el propósito de preparar la rocambolesca fuga, según informaron fuentes de la lucha antiterrorista. La dirección de la banda envió a Portugal un comando en la primavera de 2007 y otro en el verano de 2008 para estudiar la viabilidad del plan y ver si podían ejecutarlo, pero en ambas ocasiones fracasaron. Se cree que también se intentó una vez más pero sin éxito.

Una de las hipótesis con las que trabajan los investigadores es que el plan de ETA consistía en secuestrar a la familia del piloto de un helicóptero para obligar al profesional a volar con el aparato hasta el patio de la cárcel de Huelva donde recogería a los dos presos y después los trasladaría a territorio portugués.

La Guardia Civil trabaja con la posibilidad de que ETA volviese a intentar ejecutar este verano el plan de fuga de varios internos de la prisión de Huelva ya que la dirección de la banda terrorista ETA todavía mantiene activado el plan frustrado en años anteriores. La Guardia Civil no descarta que la banda lo volviese a intentar en los próximos meses pese a prepararlo en 2007 y 2008, lo que ha precipitado la operación policial que se ha saldado con la detención, ayer, de siete personas, entre ellos tres presos etarras.

Desde 1985, las cárceles españolas no han sufrido la fuga de ningún preso de la banda terrorista ETA, aunque sí han sido numerosos los intentos y los planes de escapada con métodos tan osados como la huida en helicóptero desde el patio de la cárcel, la construcción de túneles o incluso el uso de explosivos. La última fuga en España se produjo en la cárcel donostiarra de Martutene en julio de 1985, cuando los etarras Iñaki Picabea y Joseba Sarrionaindía consiguieron escapar escondidos en el interior de dos altavoces. Los fugados aprovecharon la actuación musical que ese día había ofrecido en el centro penitenciario el cantautor vasco Imanol Lárzabal. Desde entonces, en España, todo han sido fugas frustradas o planes fallidos. Bastante más éxito han tenido en las últimas décadas los presos etarras en suelo francés.