Pablo Iglesias, rodeado de micrófonos este lunes en Madrid. | Reuters

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El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha reiterado su disposición a dialogar con todos, pero ha admitido que su programa es incompatible con el de Ciudadanos y ha instado a Pedro Sánchez a apostar por su oferta de Gobierno de cambio y no por el inmovilismo que prefiere C's y «el comando Corcuera».

De esta forma se ha referido Iglesias en el Congreso a un posible acercamiento del PSOE a Ciudadanos y Podemos y ha recordado que ha sido el partido de Albert Rivera el que ha dicho que nunca apoyaría un gobierno en el que él estuviera y que sus programas, especialmente en materia económica, son incompatibles.

«Nosotros tenemos voluntad de estar en el Gobierno y creo que efectivamente nuestro programa es incompatible con el de Ciudadanos, que está planteando ponerse de acuerdo con PP y PSOE», ha dicho tras recalcar que Podemos por esa vía no va a apostar y que sigue esperando que el PSOE responda a su propuesta de Gobierno.

En este sentido, ha lamentado que se produzcan declaraciones como las de la presidenta andaluza, Susana Díaz, «tan agresivas» que «no ayudan» a que haya un «gobierno de progreso» y, tras enfatizar que hay «mucha ilusión» entre los españoles para que eso pueda llevarse a cabo, ha emplazado a Sánchez a superar los «obstáculos».

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«Nosotros vamos a trabajar y a ayudar a Pedro Sánchez a que trate de superar los obstáculos que le están poniendo en muchos niveles», ha destacado citando a los «poderes económicos dentro y fuera de España» y a las voces que dentro del PSOE quieren «impedir» ese gobierno de progreso, a quienes ha bautizado como el «comando Corcuera».

Ha insistido en que hay «básicamente dos opciones de gobierno: la que prefieren el PP y C's «y parece que el equipo Corcuera del PSOE» -ha dicho-, y la que ofrece Podemos, «un Gobierno de cambio» en el que Pedro Sánchez sea presidente y Pablo Iglesias vicepresidente, y en el que además esté IU.

Un Gobierno que piensa que es el que preferirían también los votantes y las bases socialistas, por lo que cree que es una buena decisión que democratiza el partido que Sánchez haya optado por consultar a sus militantes.

«Creo que Pedro Sánchez tiene que elegir si quiere hacer un gobierno con lo que hace poco llamaba las derechas o si por fin se pone a estudiar nuestra oferta, porque llevamos díez días sin hablar ni siquiera por teléfono, y nos ponemos a trabajar».