En su sentencia, la sección tercera de la Audiencia considera que no existen «elementos concluyentes» para condenar a los antidisturbios, dado que «resulta imposible» saber quién disparó el proyectil que reventó el ojo a Ester Quintana y no se tiene la certeza de que «las lesiones fueran causadas, necesariamente, por una pelota de goma».
Pese a la absolución, la manifestante ya fue indemnizada con 260.931 euros por el Departamento de Interior, en un acuerdo extrajudicial fraguado en vísperas de que el caso llegara a juicio y por el que la consellería asumía que Quintana fue herida en una «actuación policial».
En su sentencia, el tribunal asume la tesis de la defensa de los antidisturbios, que se centró en sembrar las dudas tanto sobre la autoría del disparo como sobre el arma que lesionó a la manifestante, y concluye que resulta «imposible determinar» si lo que hirió a Quintana fue un proyectil de precisión o una pelota de goma.
«Podemos afirmar que lo más probable es que las lesiones sufridas por Ester Quintana fueron consecuencia de un impacto recibido en el ojo por una pelota de goma, pero lo cierto es que no podemos excluir que también pudiera ser debido al impacto de un proyectil de foam», mantiene la sala en su sentencia.
La Fiscalía pedía dos años de prisión y cuatro de inhabilitación para los dos agentes, a los que acusaba de un delito de lesiones imprudentes por disparar la pelota de goma, que segó el nervio óptico de Quintana cuando regresaba a casa al término de la manifestación por la huelga general de 14 de noviembre de 2012.
Por su parte, la acusación particular ejercida por la manifestante reclamaba nueve años de cárcel para ellos por un delito de lesiones -no imprudentes-, al entender que al disparar una pelota de goma contra los manifestantes aceptaron la probabilidad de provocar daños como los que sufrió Ester Quintana.
Desde que quedó ciega de un ojo, Quintana ha abanderado la lucha contra el uso de las pelotas de goma, que el Parlament acabó prohibiendo en 2014, pese a que el Departamento de Interior siempre ha mantenido que en toda la jornada de la huelga general de noviembre de 2014 no se disparó ese tipo de munición antidisturbios.
La gestión del caso por parte del Departamento de Interior, que desde 2012 ha cambiado media docena de veces su versión de los hechos, fue uno de los desencadenantes de la dimisión de Manel Prat como director de los Mossos d'Esquadra, con Ramon Espadaler (UDC) al frente de la consellería, en mayo de 2014, en vísperas de que el Parlament debatiera su destitución.
34 comentarios
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Normal que los absolvieran,no había ninguna prueba de que hubieran sido esos dos.ya ha cobrado una indemnización de más de 200 mil euros el grifo se ha cerrado.Que tenga suerte ,pero si no hay filmaciones es muy difícil demostrar estas cosas.
Y ahora darme todos los negativos que querais que me la pela!!
Estaba alli porque queria y sabia a lo que se exponia. Yo estoy arta de pagar con mis impuestos pagar los desperfectos del mobiliario urbano que se destroza en estas "manifestaciones" a causa de unos impresentables llenos de odio que lo unico que buscan es liarla y cargar contra la policia. Asi que si esta señorita se hubiera quedado en su casa esto no le hubiera sucedido. Enhorabuena a los mossos.
si a los mossos les queda un calvario por tener que ir de romería hasta el Supremo, que imaginen hacerlo sin un OJO... pelotas de goma fuera ya!....está claro que no sabéis usarlas
Parad!. Parad!, que soy colega!.
A los mossos les faltan huevos con los que le plantan cara , basta ver ahora con los okupas y si le echan la culpa a colau que vayan a por ella como perroflauta que es......os faltan huevos.....
Por su comportamiento del que nos han dado sobradas muestras de "exceso de celo" y "uso desmedido de la fuerza", creo sería conveniente cambiarles el nombre por el "Mossos de Quadra".
El Karma no perdona. Al tiempo.
También haban mal de los demás colectivos profesionales , y no por esto nos liamos a insultos con la gente.
Jaime, en tu escueto comentari hay mas insultos que palabras. Violencia no es sólo pegar, también nsultar hablando o escribiendo es violencia, y tampoco denota ser muy inteligente por parte del que lo hace. Me he fijado que por aqui, hay algunos que se ponen como fieras cuando ven que otros tienen opiniones diferentes a las suyas. Ah, y no sou el que ha escrito el primer comentario.