Vista general del Senado antes del pleno que debate mociones e iniciativas legislativas este miércoles. | Efe - Zipi

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La amplía mayoría del Senado se ha posicionado en contra de la toma en consideración de una Proposición de Ley presentada por ERC para establecer la edad mínima electoral en los 16 años. El PSOE se ha sumado al rechazo del PP, Ciudadanos, Vox, PNV y PRC, y ha acusado a los republicanos de presentar esta propuesta a las puertas de un proceso electoral en Cataluña.

El encargado de defender esta iniciativa parlamentaria ha sido el senador Bernat Picornell, quién ha expresado la «decepción» de su grupo ante la negativa del PSOE a apoyar esta toma en consideración. El parlamentario catalán se ha mostrado muy crítico con el Grupo dirigido por Ander Gil y le ha recordado que esta reivindicación se encuentra en el acuerdo programático firmado entre la formación 'socialista' y Unidas Podemos.

Según ha defendido Picornell, en este escrito entre ambas formaciones que están en el Gobierno de coalición, sendos partidos se comprometían a iniciar el debate para ampliar el espectro electoral a los jóvenes de 16 y 17 años. «Faltan a su palabra», ha reprochado el senador de ERC, que ha asegurado que esta iniciativa es una toma en consideración, por lo que se abriría el camino para debatir sobre esta cuestión.

Además, ERC recuerda que el PSOE ya apoyó esta reivindicación histórica en el Congreso en 2016, pero que sin embargo, no llegó a iniciar su trámite parlamentario ante la disolución de las Cámaras al no conformarse Gobierno.

En este sentido, el senador 'socialista' Raúl Díaz ha reprochado a ERC que esta iniciativa no salió adelante en el Congreso durante 2006 porque su formación no apoyó el debate de investidura del por aquel entonces candidato del PSOE, Pedro Sánchez.

Asimismo, el parlamentario 'socialista' ha justificado su voto en contra porque considera que no se da el «tempo político» como para tramitarlo ahora, si bien ha defendido que se trata también de una reivindicación histórica por parte de las juventudes de su partido y que seguirán trabajando para tenerla en cuenta.

Modificación profunda

Durante el turno de portavoces, el senador de Ciudadanos Fran Hervías también ha cargado contra la iniciativa «un poco sospechosa» de ERC porque considera que, con esta propuesta, pretenden conseguir más apoyo para sus «delirios separatistas». Algo en lo que también ha coincidido VOX, que ha mostrado su rechazo a la iniciativa porque cree que, ampliando el espectro electoral, los republicanos buscan «cargarse la Constitución».

Sin embargo, el parlamentario de Ciudadanos ha planteado una modificación más produnda de la ley electoral, que ha tachado de «injusta» recordando que ERC tiene más diputados que su formación en el Congreso, «con la mitad de votos». Así, ha pedido una reflexión sobre las listas desbloqueadas, el voto rogado y el que el voto valga más en algunos territorios que en otros.

Por su parte, el Partido Popular también ha rechazado la propuesta de ERC y ha defendido que, en el actual marco constitucional, se establece la mayoría de edad en los 18 años, condición para poder ejercer el derecho al voto. En esta línea también se ha dirigido el senador del PNV, que ha defendido que esta cuestión requiere de un mayor consenso y se ha mostrado dispuesto a afrontar un debate integral.

Un dilema

También se ha posicionado en contra el parlamentario del PRC: «Estamos de acuerdo con que hace falta una reflexión, pero no estamos de acuerdo con que a los 16 años se pueda votar y además ser elegido para representar en órganos públicos».

La propuesta sí que ha contado con el apoyo de Más Madrid, que llevaba en su programa electoral esta reivindicación histórica, y que además ha instado al PSOE a apoyarlo. También los socios de Gobierno de ERC en Cataluña, Junts, han mostrado su conformidad con la iniciativa de rebajar la edad electoral a los 16 años.

Quién ha mostrado su abstención ha sido el parlamentario de Teruel Existe, que ha reconocido que tiene un dilema con que los jóvenes de 16 y 17 años tengan algunas responsabilidades laborales o de otra índole y no puedan votar.