El centro de Palma se mantiene como la zona más cara. | Teresa Ayuga

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El acceso a la vivienda a un precio asequible en Baleares seguirá siendo uno de los grandes temas pendientes este año ya que, por el momento, ninguna voz del sector inmobiliario ha augurado ni un descenso ni una estabilización de los precios. El precio de la vivienda sigue al alza y así lo revelan diferentes portales y estudios si bien los porcentajes de incremento pueden diferir. En Palma, según el portal Precioviviendas.com, en el primer semestre del pasado año el precio de la vivienda en la ciudad se incrementó cerca de un 10 % en comparación con el mismo período de 2017, de forma que el precio medio en la ciudad se situó en los 2.543 euros el metro cuadrado. Sin embargo, la evolución fue dispar por zonas.

En concreto, la vía de la capital balear que experimentó un mayor aumento del precio de la vivienda fue la calle Francesc Martí i Mora, en el barrio de Son Cotoner, con un incremento medio del 17,5 %. El coste medio del metro cuadrado en esta calle, donde se han construido nuevas viviendas, se situó en los 2.451 euros. Además, esta vía figura en el top 100 de las calles de municipios de más de 25.000 habitantes del Estado con los mayores incrementos de precios del Estado.

Por su parte, el casco antiguo de Palma se mantiene como una de las zonas más caras para adquirir una vivienda. En la calle de la Portella el precio medio alcanzó los 5.464 euros el metro cuadrado en el primer semestre del pasado año, convirtiéndose en la calle más cara de la ciudad. La segunda vía con el coste más elevado también está ubicada en el casco antiguo. Se trata de la calle Miramar, cuyo precio medio se situó en los 5.239 euros el metro cuadrado.

Sin embargo, las vías de Palma donde más aumentó el precio de la vivienda no forman parte de las zonas más caras para vivir. En la calle de Manacor subió un 17 % y en Avinguda Argentina, un 16 %. Estos datos ponen de manifiesto que se consolida la tendencia alcista iniciada hace unos años. Habrá que ver si las nuevas promociones en marcha, al aumentar la oferta de vivienda en venta, conllevan una estabilización de precios.