En las semanas previas a las elecciones municipales se instaló un cartel anunciando la construcción del campo de fútbol de Son Ferrer.

TW
0

La alcaldesa de Calvià, Margarita Nájera, ha anunciado que la revisión del PGOU prevé impedir construir en determinados solares urbanos de la primera línea costera del municipio. «Hemos pintado de verde solares de primerísima línea, con un impresionante valor paisajístico, que en el mercado nacional e internacional está a unos precios desorbitados, para poderlos expropiar y que sean zonas verdes de uso público», explicó la batlessa.

Buena parte de estos terrenos que el equipo de gobierno socialista quiere que pasen a engrosar el patrimonio público ya tienen precio, pues se han producido entrevistas al respecto con sus actuales propietarios. La expropiación o compra de terrenos se producirá en dos frentes. Por una parte, solares de primerísima línea. Por otra, parcelas urbanas de segunda o tercera línea pero en núcleos de población densificados y que precisan un esponjamiento, como son los casos de Magaluf y Palmanova.

Algunos de los solares en el punto de mira del Consistorio ya han sido negociados con sus actuales dueños. Así, el Ajuntament prevé hacerse con dos solares de Santa Ponça, ubicados frente a las islas Malgrats, por un precio aproximado de 325 millones de pesetas. Un solar pertenece a un ciudadano árabe y otro a un propietario de nacionalidad alemana. Se trataría de unos terrenos de 8.125 metros cuadrados que se expropiarían o comprarían a razón de unas 40.000 pesetas/m2.