Este hecho fue confirmado ayer por el primer teniente de alcalde y
delegado de Urbanismo del Ajuntament d'Artà, Josep Silva. El famoso
deportista ha presentado un proyecto de legalización que en estos
momentos está pendiente de la aprobación de la Comissió Insular
d'Urbanisme de Mallorca.
Silva ha explicado que el problema radica «en que las Normas
Subsidiarias contemplan que sólo puede hacerse una edificación que
no sobrepase los 500 m2 por cada parcela superior a los 15.000 m2 y
la casa del tenista supera los 700 m2».
La finca de Becker tiene 240.000 metros cuadrados, que es la
suma de las cuatro fincas que adquirió en el predio de Son Coll.
Según Silva, «si no hubiese unificado todas las parcelas en una
sola finca habría podido construir cuatro viviendas pero de esta
manera y según nuestra normativa sólo puede construir una que no
supere los 500 metros cuadrados».
El delegado de Urbanismo no descarta «llegar a un acuerdo con el
tenista pero antes es necesario un informe favorable de la Comissió
Insular d'Urbanisme ya que este organismo tiene las competencias
para poder legalizar la casa». Las causas de que haya un exceso de
volumen son una pista de tenis y una piscina que Boris Becker se
está construyendo. De todas maneras, «aunque la CIUM no parece que
vaya a informar favorablemente podemos afirmar que el problema está
en vías de solucionarse», concluyó.
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