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M. COMÍN Las obras de soterramiento de las líneas de alta tensión en Alcúdia estarán completamente listas para la temporada turística de 2002. Así lo manifestó el alcalde de la localidad, Miquel Ferrer, tras el acto de firma del convenio que tuvo lugar ayer en el municipio y en el que estuvieron presentes representantes de GESA y de los establecimientos hoteleros colaboradores. El director general de GESA, Jaume Reguart, y el alcalde Ferrer se comprometieron ayer con su firma a asumir los trabajos de ejecución de dichas obras.

Según el convenio, el Ajuntament se responsabilizará de todos los trabajos de obra civil necesarios para la instalación de las canalizaciones y de la tramitación, mientras que GESA se ocupará del desmonte de los tramos aéreos que serán sustituidos y del suministro e instalación de los cables subterráneos.

De los 386 millones de pesetas que costarán las obras, GESA aportará 223 millones y el Ajuntament 163 millones, de los que el Consell aportará 15 y diversos hoteleros de la zona otros 146 millones.

El presidente de la Asociación de Hoteleros de Alcúdia, Miquel Ramis, manifestó que «iniciativas como ésta desmienten a quienes defienden que los hoteleros sólo se preocupan por sus bolsillos». Reguard aseguró, por su parte, que acuerdos de este tipo dan luz al debate sobre soterramiento de cables en la Isla.